Comportamiento post-cosecha de la cereza en atmósferas protectoras
- Autores: Sara Remón Oliver
- Directores de la Tesis: Rosa Pilar Oria Almudí (dir. tes.), Ángel Ignacio Negueruela Suberviola (codir. tes.)
- Lectura: En la Universidad de Zaragoza ( España ) en 2001
- Idioma: español
- Tribunal Calificador de la Tesis: Francisco Javier Sala Trepat (presid.), Maria Luisa Salvador Solano (secret.), Jose M. Martinez Javega (voc.), Isabel Gil Maria (voc.), Francisco Abraham Tomás Barberán (voc.)
- Materias:
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- Resumen
La cereza es un fruto extremadamente perecedero, no climatérico, cuya fisiología y evolución postcosecha han sido muy poco estudiados.
El objetivo general de este trabajo ha sido caracterizar el proceso madurativo de la cereza Burlat así como determinar el efecto de las atmósferas protectoras en esta y en otras variedades de cereza con el fin de establecer unos parámetros óptimos de tratamientos postrecolección que permitan prolongar su vida útil, manteniendo una alta calidad.
Se ha caracterizado el proceso madurativo de la cereza Burlat observándose marcadas diferencias con respecto al de variedades más tardías. La variedad Burlat presenta una mayor producción de etileno, superior tasa respiratoria, menos resistencia mecánica, así como una menor acidez que las cerezas Sunburst y Sweetheart. A pesar de que la cereza es un fruto no climatérico se observa un incremento en la producción de etileno durante la maduración. Por último, el estudio realizado durante la maduración indica la posibilidad de utilizar el color como un índice de madurez.
El incremento de dióxido de carbono en las atmósferas de almacenamiento ejerce un claro efecto protector sobre algunas de las características de la cereza: mantiene valores más altos de acidez, provoca un incremento de la resistencia mecánica, así como una menor actividad PPO y POX. No ejerce ningún efecto sobre las actividades PME, PG, ni sobre el contenido en sólidos solubles, y provoca una menor síntesis de antocianos. Globalmente podemos concluir que la utilización de atmósferas enriquecidas en dióxido de carbono resulta altamente beneficiosa para la conservación de la cereza.
A pesar de que tradicionalmente la cereza se clasifica como un fruto muy tolerante a las altas concentraciones de dióxido de carbono (>20%), los resultados obtendios para la variedad Burlat indican una tolerancia mucho menor. Así, cuando el incremento en dióxido de carbono (12%) se
