Se ha planteado un trabajo, en el marco de la Denominación de Origen Jumilla, que tiene como objetivo principal ofrecer un nuevo tipo de vino de calidad, estable y con características adecuadas para una crianza no muy prolongada, en concordancia con las tendencias actuales del mercado, en el que se perciba la tipicidad de la variedad Monastrell (la predominante de esta D.O.) pero que se complementen algunas de sus características con las de otras viníferas de reconocido prestigio como Cabernet-Sauvignon, Merlot, Rubi-Cabernet, Syrah y Tempranillo.
Así, durante tres cosechas consecutivas, se han vendimiado y elaborado vinos monovarietales de cada una de las variedades mencionadas con maceraciones cortas y largas, y también se han realizado vinificaciones binarias entre Monastrell con Cabernet-Sauvignon y Merlot en diferentes proporciones (covinificación).
Se han estudiado las características de estos vinos (color, compuestos fenólicos y aromas) y también se les ha sometido a una evaluación sensorial (cata) por parte de expertos.
Se ha concluido que las maceraciones largas mejoran notablemente la aptitud de los vinos para ser sometidos a crianza, especialmente los de las variedades complementarias, y que entre las viníferas estudiadas, las más adecuadas para complementar a la Monastrell son Cabernet-Sauvignon y Merlot. La calidad de la Monastrell está muy condicionada por las condiciones de cultivo y cuando éstas son las adecuadas, las uvas de Monastrell poseen una alta calidad y sus vinos son similares o superiores a los de Cabernet-Sauvignon y Merlot.
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