En un territorio como el de nuestra provincia, en que la franja litoral, de clima atractivo, con notable actividad pesquera, turística, mercantil y de servicios alterna con áreas montañosas de clima continental y potente industria; o con grandes espacios de notable riqueza agrícola y aún con planas y quebradas mesetarias de viñedo, olivo y cereal, se comprende que la alimentación, como otras manifestaciones culturales, ha de presentar diferencias notables de una a otra comarca.
El estudio analítico de sus preparaciones culinarias nos informa de su idoneidad nutritiva y del ingenio que, apoyado en una cultura gastronómica ancestral, ha sido capaz de erigir una cocina variada, de notable valor alimenticio de gran calidad gastronómica: la dieta alicantina, identificable con la llamada dieta mediterránea y de constituye actualmente una norma alimentaria de elección, tanto en orden a la preservación de la salud como al sosegado disfrute de los sentidos.
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