Hablar de autismo hoy día es una tarea un tanto compleja, pero si se habla desde el corazón sepueden lograr infinidad de cosas maravillosas. El alumnado que convive con un compañero/a conautismo, debe conocer sus características, puntos fuertes, debilidades y hasta conocer un poco cómopuede pensar si utilizamos la magia de la empatía.Hoy en día es muy complicado hablar sobre normalidad, pretendemos normalizar la vida de lapersona con autismo, cuando en realidad somo nosotros, la sociedad, los que debemos adaptarnosa su forma de ver la vida y no pedirles que ellos cambien.Desde la escuela debemos facilitar la vida de estos niños y niñas y tratar de trabajar desde unenfoque globalizador de la persona en su conjunto y no sólo desde el ámbito curricular.Lo ideal es comenzar a edades tempranas a trabajar la igualdad y el respeto por las diferencias. Loque es normal o no depende de cada uno de nosotros/as. Desde los primeros cursos de educacióninfantil se deben tratar estos temas de forma lúdica, para ir formando sus mentes en el respeto y enuna educación empática, valores hoy en día muy distanciados de nuestra sociedad.Por todo ello propongo una actividad sencilla para iniciar a los más pequeños de los centrosescolares en este asunto vital. La tarea surge de la necesidad de explicar qué le pasa a un compañerode clase con TEA, del que se comienzan a hacer preguntas.En esta actividad, que comenzó en una clase de cuatro años, acabaron participando niños/as detercero y cuarto de primaria, uniéndose así a la iniciativa y a la experiencia de comprender quetodos somos seres tan únicos y tan iguales como diferentes, y que en esa diferencia está la magia yla grandeza de todos/as nosotros/as.
Talking about autism today is a somewhat complex task, but if you speak from the heart you canachieve countless wonderful things. Students who live with a partner with autism should know theircharacteristics, strengths, weaknesses and even know a little how they can think if we use the magicof empathy.Today it is very difficult to talk about normality, we intend to normalize the life of the person withautism, when in reality it is, we, society, who must adapt to their way of seeing life and not ask themto change.From school we must facilitate the lives of these children and try to work from a globalizing approachof the person as a whole and not only from the curricular field. Ideally, begin at an early age to work on equality and respect for differences. What is normal or notdepends on each one of us. From the first courses of early childhood education, these topics shouldbe treated in a playful way, to form their minds in respect and empathic education, values that arevery distant from our society today.Therefore, we propose a simple activity to initiate the smallest of schools in this vital matter. The taskarises from the need to explain what happens to a classmate with autism, from which they begin toask questions.In this activity, which began in a four-year class, children in third and fourth grade ended upparticipating, thus joining the initiative and the experience of understanding that we are all beings asunique and as equal as different, and that in That difference is the magic and greatness of all of us.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados