Resumen de ¿Cuán igualador es el gasto público en educación en Argentina? Un análisis para 2017

Cecilia Adrogué De deane, Eugenia Orlicki

• español

  El objetivo de este trabajo es cuantificar el efecto distributivo del gasto público en educación en Argentina, en lo que respecta tanto a la provisión de la Educación de Gestión Pública como al subsidio a la Educación de Gestión Privada. Utilizando datos provenientes del Ministerio de Educación de la Nación y de la Encuesta Permanente de Hogares del año 2017 se analiza cómo se modifica la distribución de ingresos de los hogares al adicionarle el monto correspondiente al gasto público en educación por alumno para todos aquellos niños y jóvenes que asisten a establecimientos públicos, y el monto asignado en subsidios para aquellos que asisten a establecimientos de gestión privada subsidiados. La adición de ese gasto como un ingreso del hogar al que pertenece el niño o joven da como resultado una distribución más progresiva para los cuatro niveles, es decir, menos desigual que la distribución de los ingresos sin incorporarlo. Esta progresividad se observa cuando se analizan ambos tipos de gasto por nivel educativo –provisión pública del servicio y subsidio a la provisión privada-, tanto en forma conjunta como por separado. A su vez, se observa que el gasto tiene un efecto progresivo y pro-pobre en los niveles inicial, primario y secundario -es decir, la distribución de ingresos es más igualitaria que antes de la provisión de estos niveles educativos, y, además, esta transferencia está concentrada entre los hogares que tienen menores ingresos-. El gasto correspondiente al nivel superior tiene un efecto progresivo, pero no pro-pobre.

  Fecha de recepción: 13/7/2021 Fecha de aceptación: 6/9/2021

• English

  The aim of this article is to quantify the distributive effect of public spending on education in Argentina, with regard to both the provision of public education and the subsidy for private education. Using data from the National Ministry of Education and the Permanent Household Survey of 2017, it is analyzed how the distribution of household income is modified by adding the amount corresponding to the public spending on education per student that children and youths who attend public institutions receive in the public sphere, and the amount allocated in subsidies for those who attend subsidized privately run establishments. The application of this expenditure results in a more progressive distribution in the four levels, that is to say, a less unequal distribution than that of incomes without its incorporation. This progressivity is observed when both types of spending are analyzed by educational level –public provision of the service and subsidy to private provision-, both jointly and separately. In turn, it is observed that the expenditure on the initial, primary and secondary public levels has a progressive and pro-poor effect -that is, the income distribution is more egalitarian than before the provision of these educational levels and, furthermore, this transfer is concentrated among households with lower incomes-, while expenditure on public higher education has a progressive, but not pro-poor, effect.