Estefanía Paredes Rosendo, Sara Campos Ibáñez, Jesús Souza Troncoso
La criopreservación permite la conservación de células o tejidos en condiciones de vida suspendida usando temperaturas criogénicas. Se ha utilizado con éxito en ganadería y conservación de la biodiversidad terrestre, sin embargo su aplicación a organismos marinos es todavía novedosa. En muchos casos desconocemos por completo factores biológicos determinantes para el desarrollo de un protocolo exitoso de criopreservación y se conocen aún poco las particularidades de criopreservar organismos cuyos solutos internos contienen una mayor concentración de sales que los terrestres. A pesar de estas lagunas de conocimiento biológico y técnico se han conseguido avances notables en el campo con aplicaciones a la acuicultura sobre todo en moluscos como ostra o mejillón y en conservación de la biodiversidad en corales y equinodermos.
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