Resumen de Can Activity Worthwhileness Explain OCB-I Change?: The Mediating Role of Positive Emotions

Aleksandra Muric, Aida Soriano Ripoll, Salvatore Zappala, José María Peiró Silla

• español

  La competitividad de los mercados actuales requiere que los empleados hagan más de lo que formalmente se espera de ellos colaborando con otros para favorecer a la organización (por ejemplo, comportamiento de ciudadanía organizacional centrado en las personas, OCB-I). Partiendo de la idea de que el bienestar eudaimónico influye positivamente en el OCB-I, y considerando que las emociones positivas conducen a un funcionamiento óptimo y a importantes resultados laborales, el presente estudio analiza el papel mediador de las emociones positivas en la relación entre la valía de la actividad y el OCB-I. Los resultados de regresiones jerárquicas en el presente estudio longitudinal con una muestra de 108 trabajadores administrativos muestran que la valía de la actividad explica indirecta, pero no directamente, el cambio en OCB-I a través de las emociones positivas. Por lo tanto, cuando se trata de mejorar el desempeño en el lugar de trabajo, la inversión en bienestar, tanto hedónico como eudaimónico, contribuye a favorecer tanto a los empleados como a las organizaciones.

• English

  The competitiveness of today’s markets requires employees to do more than is formally expected from them by collaborating with others to benefit the organization (e.g., organizational citizenship behavior focused on individuals, OCB-I). Based on the idea that eudaimonic wellbeing positively influences OCB-I, and considering that positive emotions lead to optimal functioning and important work outcomes, this study analyzes the mediating role of positive emotions in the relationship between activity worthwhileness and OCB-I. Results of hierarchical regressions in a two-wave longitudinal study with a sample of 108 white collar employees show that activity worthwhileness indirectly (but not directly) explains change in OCB-I through positive emotions. Therefore, when it comes to improving performance in the workplace, investment in both hedonic and eudaimonic wellbeing contributes to more effectively benefitting both employees and organizations.