1989: un final que es principio. A comienzos de los años ochenta, Estados Unidos y la Unión Soviética dirigieroon simultáneamente sus mejores esfuerzos a restañar sus heridas y a intentar redefinir las bases de su poder en el mundo. La guerra fría entraba en su quinta década y ambas naciones se habían obligado durante todo ese tiempo a un esfuerzo gigantesco por asegurarse el papel preeminente en el difícil mundo surgido después de la Segunda Guerra Mundial.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados