Granada, España
Una de las principales novedades de la novísima Ley de contratos de crédito inmobiliario (LCCI), de 15 de marzo de 2019, es su clara vocación de potenciar la protección no sólo de las personas físicas que son consumidores sino también de las demás personas físicas que solicitan un préstamo hipotecario. La LCCI, que transpone parcialmente la Directiva 2014/17/UE, de 4 de febrero de 2014, va más allá de los mandatos de esta normativa europea, al extender el paraguas protector en la concesión de préstamos hipotecarios a cualquier prestatario que sea persona física. Esta protección tan amplia no está exenta de contradicciones y de problemas legales y prácticos que abordaremos en el presente trabajo.
One of the main innovations from the Contracts for real estate credits Act ("LCCI", Ley de Contratos de Crédito Inmobiliario) of march 2019 is that it wants to protect not only consumers but also other physical persons who ask for a real estate credit. The "LCCI" partially transposes Directive 17/2014/EU of february 2014, but it goes beyond the contents of this Directives since it broadens the subjective protection: not only consumers but also other physical persons asking for real estate credits. This broader protection presents both contradictions and legal and practical problems that will be analyzed in this study.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados