La radio fue, en las grandes metrópolis y hasta 1950, el medio de comunicación más importante, tanto para obtener información como para acceder al entretenimiento a través de las radionovelas y los programas de música (con orquesta en vivo), entre otros formatos. El cine y la televisión fueron reemplazando paulatinamente la incidencia de la radiofonía, pero también es cierto que un público fiel, por edad, profesión o modo de trabajo (audiencias definidas y segmentadas) sigue encontrando en este medio una suerte de acceso instantáneo a la información y la música, que ningún otro medio ofrece, ni siquiera Internet. Las funciones de las emisoras universitarias son, en su mayoría, las de transmitir información, divulgar conocimiento y promover la extensión social y cultural. Con las pertinentes diferencias entre las distintas estaciones, son emisoras con programaciones generalistas y la realidad impone que cada una de estas emisoras tenga unas características muy diferentes. Es en Argentina donde surge la primera emisora de radio universitaria de América del Sur, en la Universidad de La Plata en 1923. Colombia la sigue y en julio de 1937 es México el tercer país en tener un medio de este tipo. Surge Radio UNAM (Radio de la Universidad Nacional Autónoma de México). Hoy existen más de 350 emisoras universitarias en todo sur y centro Amé-rica. Aunque es una gran cantidad, lejos está de acercarse a las casi 1.200 emisoras que poseen EE. UU. y Canadá. En Europa son países como Inglaterra y Francia los que primero desarrollan el medio radiofónico universitario y en España surgen en la última década del siglo XX y se afianzan en los primeros años del XXI. Hoy son más de 25 las universidades españolas que poseen frecuencias de radio o trabajan en relación a otros medios y señales regionales.
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