La prueba pericial no ostenta el monopolio entre los mecanismos de acceso de conocimiento científico al proceso civil y, en ocasiones, no es la forma idónea, suficiente o proporcionada a tal efecto. Por una parte, otros medios de prueba también pueden ser vehículo para aportarlo, rebajando así el papel de la prueba pericial a un carácter meramente instrumental. Por otro lado, en determinados ámbitos, se exige la intervención de especialistas que, si bien reciben un tratamiento procesal parcialmente coincidente, stricto sensu no deben ser considerados peritos (médicos forenses, equipos técnicos judiciales, etc.) Se analizan estos supuestos y sus consecuencias procesales: particularidades en el tratamiento, criterios de valoración, etc.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados