En la actualidad las tuberías de fibrocemento son las más utilizadas en las redes de distribución de agua potable, sustituyendo a otros materiales que se usaban tradicionalmente. Dependiendo de la calidad del agua que circula por ellas, se pueden producir alteraciones en la superficie de las mismas, liberándose en consecuencia fibras de asbestos, a la vez que se modifican algunas características del agua.
El pH, alcalinidad, dureza, temperatura, oxígeno y dióxido de carbono disueltos son los principales factores que influyen en la agresividad del agua.
El índice de agresividad viene dado por:
IA= pH + 1 g (A x H) siendo:
A= alcalinidad total de CO3Ca en mg/l.
H= dureza en calcio como C03Ca en mg/l.
Considerándose:
IA menor que 10 agua muy agresiva.
10 igual o menor que IA e igual o menor que 12 agua moderadamente agresiva.
IA mayor que 12 agua no agresiva.
(AWWA, 1977).
Sin embargo, este índice está excesivamente simplificado, ya que no tiene en cuenta la presencia de constituyentes protectores naturales (M.R. Schock, 1981). Existen tratamientos para minimizar los problemas de deterioro de las tuberías de fibrocemento: el carbonato cálcico puede precipitar y adherirse a la superficie de la tubería para formar una capa protectora, de igual forma pueden hacerlo determinados compuestos de hierro, manganeso, cinc y silicio.
Según la cuenca hidrográfica y el período estacional, hay una variación en la agresividad de las aguas, y por tanto, en su comportamiento en las redes de distribución de agua potable.
De lo anteriormente expuesto se deduce que las aguas de consumo público podrían contener fibras de asbestos y dado que su toxicidad por inhalación está totalmente comprobada (asbestosis, carcinoma de pulmón, etc.) se ha revisado una amplia documentación sobre los posibles efectos tóxicos de la ingestión de fibras de asbestos, con objeto de determinar si el agua contaminada con este tipo de fibras constituye un peligro para la salud.
Después del examen tanto de estudios epidemiológicos, experiencias sobre absorción de fibras de asbestos por la pared intestinal, como informes de la Organización Mundial de la Salud, e informes y reglamentaciones de distintos países, se ha llegado a la conclusión de que el estado actual de los conocimientos no permite establecer:
a) Una relación causa-efecto clara entre ingestión de asbestos y cáncer gastrointestinal.
b) Límites restrictivos de fibras de asbesto en agua potable.
(WHO, 1984; I Stefan Dupre, 1984; EPA, 1985.).
One of the most widely used means of distributing water to homes is through asbestos-cement pipe that have nowadays, substituted other materials used traditionally.
Several modifications on the pipe surface can ocurr depending on the quality of the water that flows through them producing asbestos fibers leaching which causes somne of the water characteristics to change.
The pH, hardness, alkalinity, temperature and disolved oxigen and carbon dioxide are the main factore that can affect water aggressiveness.
The Agressiveness Index (AI) is given by the formula:
AI= pH + log (A x H) where:
A= total alkalinity as CO3Ca in mg/l.
H= calcium hardness as CO3Ca in mg/l.
being:
IA minor than 10 very aggresive water.
10 minor o equal than IA and minor o equal than 12 moderately aggresive water.
IA major than 12 non aggresive water.
(Amer. Wat. Works Assoc., 1977).
However this index is not a direct measure of water corrosivity but rather is an indicator since it does not take into account the presence of possible protective coating by certain water contituents.
Hydrographic basin and season period influence the agressiveness of water and consequently its behaviour in the water distribution systems.
It can be concluded that drinking water can contain asbestos fibers, and as evidence exists which shows increased risk of several malignancies from inhalation of these fibers, the aim of this review is to determine whether asbestos ingested with drinking water is harmful to health or not.
After the examination of epidemiological studies, fiber absortion by intestinal walls, as well as World Health Organization Reports and Regulations and reports of different countries, it can be inferred that the state of the art does not allow to stablish:
a) Evidence of a cause and effect relationship between asbestos ingestion and gastrointestinal cancer.
b) Restricted limits of asbestos fibers in drinking water.
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