Antonio B. Padilla Ortega, Daniel Gómez Pérez
España se ha convertido en un país receptor de importantes flujos migratorios que están aumentando la diversidad del alumnado. El sistema educativo jugará un papel clave en el proceso de integración de los alumnos de origen inmigrante. Pero las características de gran parte de estas familias las sitúa en diferentes situaciones de desventaja social y/o económica, problemáticas muchas de ellas a las que tampoco son ajenas la población autóctona, que viene experimentando acelerados cambios sociales. Principalmente es a través de un sistema educativo que proporcione unos elevados niveles de calidad y resultados se puede garantizar la movilidad, y por ende promover la cohesión social. La colaboración con, y la eficacia de los sistemas de protección social, y en concreto de los servicios de bienestar social, serán clave fundamental para fomentar el liderazgo educativo y... también social.
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