Ecología de la regeneración de Quercus Ilex a escala de paisaje: Importancia de los depredadores y dispersores de semillas para el reclutamiento

• Autores: Carolina Puerta Piñero
• Directores de la Tesis: José María Gómez Reyes (dir. tes.), Mario Díaz Esteban (codir. tes.)
• Lectura: En la Universidad de Granada ( España ) en 2008
• Idioma: español
• ISBN: 9788433847287
• Tribunal Calificador de la Tesis: Javier Retana Alumbreros (presid.), Adela Gonzalez Megias (secret.), Diego Jordano Barbudo (voc.), Eugene W. Schupp (voc.), Pierre-Michel Forget (voc.)
• Materias:
  • Ciencias de la vida
    • Biología animal (zoología)
      • Ecología animal
    • Biología vegetal (botánica)
      • Ecología vegetal
• Enlaces
  • Tesis en acceso abierto en: DIGIBUG
• Resumen

  • Entender qué factores modulan la regeneración natural de las poblaciones vegetales ha sido, y es, una pregunta crucial en ecología. De todos estos factores, aquellos que afectan a las primeras etapas del ciclo de vida, desde semilla hasta brinzal, son los más críticos. Por tanto, la dispersión o la depredación de semillas son determinantes para el éxito de regeneración de las especies. Mientras que los procesos de regeneración ocurren generalmente a una escala espacial pequeña, las poblaciones se ubican en un rango más amplio, llegando incluso en especies leñosas a la escala regional. En esta tesis utilizo como modelo un paisaje heterogéneo de alta montaña dominado por la encina Quercus ilex. En este entorno estudio como la dispersión y depredación de bellotas varían entre diferentes escalas espaciales, y entre organismos mutualistas (dispersores) y antagónicos (depredadores). Vemos cómo la conectividad funcional de éste sistema está mediada por las interacciones entre plantas y animales. Así, los roedores parecen ejercer un papel dual de dispersores y depredadores de bellotas. Su actividad se localiza a escala local, pudiendo ejercer un papel efectivo en la regeneración, incrementando las poblaciones preexistentes dentro de encinar; así como reestructurando la ubicación espacial de las encinas a escala fina de microhábitats. Los arrendajos son sin duda los dispersores más efectivos en este sistema. La deposición de bellotas se realiza en lugares lejanos, diferentes a los de origen (fuera del encinar generalmente) así como en hábitats y microhábitats favorables para el reclutamiento y establecimiento de plántulas y brinzales. De este modo, los arrendajos actúan como mutualistas muy eficientes, ayudando tanto a la regeneración de los encinares ya existentes como a la colonización de nuevas áreas. Los ungulados parecen jugar un papel antagonista, mermando por un lado la lluvia de semillas tras la dispersión y limitando el desarrollo de los brinzales por otro. A su vez remodelan el patrón espacial de la encina después de la dispersión, ramoneando preferentemente en ciertos hábitats y microhábitats más que en otros. Estos mecanismos diferenciales de dispersión y depredación ejercidos por parte de diferentes especies, ubicadas dentro de un mismo entorno, hacen que el patrón espacial observado en los encinares sea asimismo desigual. Así, el paisaje se constituiría como un escenario heterogéneo y dinámico en el cual ciertas áreas presentan un balance global positivo, es decir donde existe regeneración efectiva, mientras que otras tienen un balance negativo, encontrándose de este modo en sostenimiento o incluso regresión poblacional.