El diagnóstico y la explicación de la fisiopatología de los tumores que pueden derivar de la cresta neural ha sido durante mucho tiempo difícil de realizar y de explicar.
Esta dificultad estriba primeramente en la gran variabilidad de signos clínicos que estos tumores producen, segundo en la gran cantidad de tumores de características diferentes que tienen el mismo origen, es decir la cresta neural, tercero el no muy completo conocimiento que se ha tenido de los diferentes pasos metabólicos de las catecolaminas desde su formación hasta su eliminación. El conocimiento de estos pasos, así como la aparición de métodos que permiten valorar cuantitativamente las catecolaminas y sus metabolitos, ha supuesto por tanto una gran ayuda en el difícil diagnóstico de estos tumores. Es más, podríamos decir que gracias a estos conocimientos y a estos métodos de valoración, podríamos hacer una “biopsia bioquímica de estos tumores y llegar así, casi con una completa seguridad, a su diagnóstico.
De aquí nuestro interés al presentar:
A) En primer lugar un estudio detallado del metabolismo de estas sustancias dedicando especial atención a sus catabolitos.
B) En segundo lugar, la descripción de los métodos con los que podemos valorar cuali y cuantitativamente estas sustancias dedicando un especial interés a las técnicas cromatográficas.
C) En tercer lugar, nuestra experiencia en el empleo de estas técnicas que han sido utilizadas no solo para el diagnóstico de los tumores derivados de la cresta neural, sino también en el de otros procesos en los que existe alteración de estas sustancias.
CONCLUSIONES:
1. De todos los métodos existentes para la determinación e os metabolitos de las catecolaminas los métodos cromatográficos son los que en la actualidad presentan mayores ventajas tales como: rapidez, economía y posibilidad de hacer una “Biopsia bioquímica” del tumor en una sola determinación. Detrás de estos métodos bioquímicos son los fluorimétricos los que más recomendamos. Los colorimétricos y biológicos por su falta de especificidad y de sensibilidad son hoy día desechable.
2. La recogida de orina para estas determinaciones han de ser hechas en condiciones standar y que consta:
A. Prohibición de tomar durante 2 días antes de la recogida de orina los siguientes alimentos y medicamentes.
a) Cualquier medicamento antihipertensivo, vasoconstrictores y vasodilatadores. También tranquilizantes de cualquier tipo.
b) Tetraciclinas y neomicinas.
c) Café, te, chocolate, vainilla, plátano y cualquier alimento que contenga gran cantidad de vitamina C.
B. Duante el día de la recogida de orina el paciente no debe encontrarse en situación de stress.
C. La orina debe ser recogida en medio ácido de pH aproximadamente 1 a 2 lo que se consigue añadiendo unos 6 c.c. de ClH puro.
D. La orina una vez recogida debe ser guardada en sitio fresco y al abrigo de la luz y enviada lo antes posible al laboratorio.
3. La recogida de los demás líquidos biológicos tales como sangre se hace en bote heparinizado conteniendo metabisulfito sódico 0,5 mgrs por c.c. de sangre. El LCR también debe ser tomado con metabisulfito y guardar en nevera y en oscuridad hasta su envío al laboratorio.
4. Creemos que como método de “scrining” deber ser utilizado la cromatografía monodimensional según el método que se describe en este trabajo.
5. A toda muestra no normal según la cromatografía monodimensional es necesario hacer una cromatografía bidimensional a fin de separar mejor las manchas de los metabolitos que nos interesen dosificar.
6. Dado que algunas sustancias como el AVL no son bien aislados en cromatografía monodimensional, en pacientes con diagnóstico de melanoma debe realizarse una bidimensional.
7. Según el presente trabajo los neuroblastomas presentan una elevada excreción de ácido homovanilinico en un 91,15% de los casos y una elevada excreción de AVM en un 77,8% de los casos.
8. Los feocromocitomas presentan un aumento de AVM en un 100% de los casos y un aumento de AHV en un 20% de los casos.
9. El aumento de excreción de APHFA debe obligar a repetidas dosificaciones de os metabolitos de las catecolaminas.
10. Al igual que los neuroblastomas los ganglioneuromas presentan también un aumento de la excreción de AHV aunque este aumento no suele ser tan marcado como en los neuroblastomas y su frecuencia es según nuestros estudios de un 77,7% frente a un 91,15% encontrado en los neuroblastomas.
11. Los melanomas tienen como principal producto de excreción, en lo que se refiere a metabolitos de las catecolaminas al ácido vanil láctico AVL en un 75% de los casos.
12. El aumento de AVM de los neuroblastomas es siempre menor que en los feocromocitomas y el aumento de AHV de los neuroblastomas es siempre mayor que en los feocromocitomas.
13. En las hipertensiones cuyo origen no sean tumores de la cresta neural los metabolitos de las catecolaminas no se modifican.
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