La antropología del conocimiento en el pensamiento de K.-O. Apel
- Autores: Angel Centeno Alfaro
- Directores de la Tesis: Juan-Antonio Nicolás Marín (dir. tes.)
- Lectura: En la Universidad de Granada ( España ) en 2011
- Idioma: español
- ISBN: 9788490280287
- Tribunal Calificador de la Tesis: Juan José Acero Fernández (presid.), Manuel Sánchez (secret.), José Manuel Romero Cuevas (voc.), Norberto Smilg Vidal (voc.), Jesús Marcial Conill Sancho (voc.)
- Materias:
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- Tesis en acceso abierto en: DIGIBUG
- Resumen
El objetivo del trabajo es la reconstrucción de la Antropología del conocimiento de Karl-Otto Apel. Se ha delimitado la Antropología del conocimiento O o Gnoseoantropología como un programa de transformación de la hermenéutica heideggeriana, desarrollado en un periodo previo a su madurez filosófica (la 'Hermenéutica transcendental' o 'Pragmática transcendental'). Concretamente, la Antropología del conocimiento pretende transformar la concepción de círculo hermenéutico, radicando sus momentos en estructuras antropológicas. De ello se sigue la consecuencia de que la constitución de sentido, que en el Heidegger tardío dependía de un acontecer destinal (Ereignis) extrahumano, pasa a depender en la Antropología del conocimiento de estructuras y categorías antropológicas: la tecnognomía, la fisiognomía y la reflexividad.
El círculo hermenéutico así transformado es una mutua determinación de tecnognomía y fisiognomía mediados reflexivamente: un 'medir-se del hombre con el mundo'. La Antropología del conocimiento ahonda el giro a la facticidad inaugurado por Heidegger: concede a la corporalidad y a la praxis social humanas (englobadas en la categoría de tecnognomía) un profundo papel: determinan la 'perspectiva' desde la cual las cosas cobran un determinado sentido. La categoría de fisiognomía expresa el aparecer fenoménico de las cosas, sin agotarse nunca en un determinado horizonte de sentido. La reflexividad permite ampliar y recrear continuamente los horizontes del lenguaje.
Esta tesis culmina bosquejando aplicaciones prácticas y proyectos de una filosofía 'existencialmente relevante'. Por un lado, una epistemología que sea capaz de responder al reto que la física relativista y cuántica han planteado a la teoría del conocimiento tradicional de herencia kantiana. Por otro lado, explora las posibilidades de una hermenéutica que pueda orientar al ser humano en la situación actual. Si bien Apel empieza proponiendo una 'hermenéutica de la situación' semejante a la hermenéutica de la tradición de Gadamer; termina desarrollando una 'hermenéutica dialéctica' o 'crítica de las ideologías' que contrarreste el peso privilegiado de la tradición.
La relevancia de la Antropología del conocimiento reside, en primer lugar, en que permite intuir los caminos de una hermenéutica filosófica alternativa a la de Heidegger y Gadamer. En este sentido, la Antropología del conocimiento pone el acento en la importancia de la corporalidad humana en la interpretación y en la particularidad fenoménica de los entes fácticos frente a la predominancia del lenguaje en su función ontológico-constitutiva. En segundo lugar, ofrece la visión de un Apel cuyo programa pragmático-transcendental de fundamentación última no ha sido propuesto en una etapa de su evolución filosófica, como respuesta a los problemas de la hermenéutica de la facticidad heideggeriana y gadameriana. Es decir: ofrece la visión de un joven Apel no-pragmático-transcendental. Por último, proporciona un acceso poco explorado y una perspectiva relativamente nueva para apreciar el pensamiento global de Apel y sus programas filosóficos más conocidos (la Hermenéutica transcendental, la teoría de la racionalidad, la Ética del discurso, etc.) así como la relación que guarda la Pragmática transcendental del lenguaje con los problemas que presentan, por ejemplo, la fisiognomía y la evidencia fenoménica.
