El control transcripcional es el mecanismo más importante por el cual se regulan los niveles, momentos y órganos en los que se expresa un gen. Este control es llevado a cabo por la interacción de factores de transcripción con sus elementos cis específicos localizados en el promotor de los genes diana. De esta forma, un factor de transcripción dado puede desempeñar diversos papeles regulando la expresión de distintos genes en respuesta a los estímulos que la planta percibe o a los propios procesos fisiológicos de ésta. En gimnospermas, concretamente en coníferas, se ha visto que el número de genes que codifican para factores de transcripción es menor que los descritos en angiospermas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados