Este estudio se justifica de considerar en materia de drogas los altos índices de consumo y adicción que se registran tanto a nivel mundial como en los casos particulares de España y México, como fenómeno que pone en evidencia el fracaso de las políticas prohibicionistas y represivas que orientan el tratamiento jurídico a dicho consumo en la mayoría de los estados modernos con nefastas consecuencias sobre derechos fundamentales como son el derecho a la salud y el derecho a la libertad personal, de tener que recurrir a un mercado negro y adulterado de drogas, que reporta a sus operadores pingues ganancias y que en aras de su control ha desatado un grave problema de inseguridad pública, lo que obliga a los estudiosos del derecho, a la búsqueda de otras alternativas, las que desde la perspectiva jurídica permitan abatir su problemática.
La hipótesis que sostenemos es que un marco jurídico de las drogas con normas claras y especiales que aborde el consumo de drogas no como un crimen, sino como un problema de salud pública, con disposiciones encaminadas a establecer la obligación del estado, en términos del derecho a la salud, de proporcionar tratamiento médico a los consumidores, garantizar terapias de sustitución y de suministro de droga en los casos más difíciles, establecer programas de prevención con campañas informativas de los riesgos que implica no sólo el consumo, sino el consumo proveniente de un mercado adulterado, permitirá armonizar los derechos fundamentales de salud y libertad entre los cuales no existe una antinomia real.
Este trabajo lo estructuramos con nueve capítulos:
En el primero, nos referimos a los aspectos terminológicos, conceptuales y fenomenológicos, de las drogas y las adicciones.
En el segundo capítulo, realizamos un esbozo histórico del uso y consumo de drogas por la humanidad para enseguida, en el capítulo tercero, hacer lo mismo con el tema de la política prohibicionista en la materia, en el que abordamos desde los antecedentes de esta prohibición, los instrumentos de derecho internacional que han intervenido y que intervienen, la estrategia europea de cambio, basada en la reducción de daños, la evaluación de la política prohibicionista y la propuesta de cambio en el seno de la ONU.
En el capítulo siguiente, el cuarto, nos referimos a dos drogas legales, como son el tabaco y el alcohol, no contempladas en la corriente de prohibición, a pesar de sus efectos dañinos. El capítulo quinto lo enfocamos al conocimiento de las drogas prohibidas sujetas a control internacional.
El capítulo sexto contiene el análisis del fracaso en la consecución de objetivos de la política prohibicionista y la exposición del debate en torno a la legalización de las drogas,. En el capítulo séptimo, el tema de análisis son los derechos fundamentales enfrentados bajo la lógica prohibicionista del consumo de drogas y en especial del consumo, con referencia al derecho a la salud y el reconocimiento por parte de la Organización Mundial de la Salud de la adicción a las drogas como una enfermedad, para enseguida, en el capítulo octavo, abordar el tema de la legitimidad del Estado para intervenir en la esfera de libertad de los consumidores de drogas, en especial, por cuestiones de salud.
En el capítulo noveno nos referimos a la cuestión de las drogas en España y México, el tratamiento jurídico y político que dispensan al consumo, planteando los puntos de encuentro, así como las diferencias que se advierten en ambos países.
Al finalizar este articulado, presentamos nuestras conclusiones y propuesta para enseguida, citar todas aquellas fuentes que nos auxiliaron para alcanzar nuestro objeto de conocimiento.
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