El tratamiento de los aneurismas cerebrales mediante el implante de stents cerebrales derivadores de flujo ha emergido como una técnica segura, reproducible, con baja morbimortalidad, y una alta tasa de oclusión definitiva. Estos datos han sido contrastados en diversos estudios cuando se trata de aneurismas localizados proximales al polígono de Willis. Sin embargo, el efecto de esta técnica no está completamente esclarecida cuando se aplica en el tratamiento de los aneurismas localizados en pequeños segmentos de vasos periféricos. Las indicaciones precisas para el uso de estos sistemas no están aún protocolizadas y presentan algunas limitaciones.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados