¿paisajes mediterráneos en la tradición homérica? (estereotipos paisajísticos para la educación en la antigua hélade)
- Autores: Víctor Díaz López
- Directores de la Tesis: J. F. Ojeda-Rivera (dir. tes.)
- Lectura: En la Universidad Pablo de Olavide ( España ) en 2021
- Idioma: español
- Tribunal Calificador de la Tesis: Josefina Cruz Villalón (presid.), Pascual Riesco Chueca (secret.), Juan Manuel Cortés Copete (voc.)
- Programa de doctorado: Programa de Doctorado en Historia y Estudios Humanísticos: Europa, América, Arte y Lenguas por la Universidad Pablo de Olavide
- Materias:
- Enlaces
- Tesis en acceso abierto en: TESEO
- Resumen
- español
Palabras clave: Objetivación, homérico, recurso, paisaje y cultura.
La presente tesis pretende aproximarse a un tema tan complejo como el de buscar las trazas de paisaje en la tradición homérica. A tal efecto y para realizar este acercamiento, y facilitar el análisis del paisaje en el desarrollo temporal propio de la narración literaria homérica, nos aproximamos a ciencias tan heterogéneas como la pintura o la geografía, en las que el paisaje encaja con meridiana claridad, pero también a la filología, psicología, cine o teatro, consideradas a priori como disciplinas ajenas a la materia de estudio.
Con un método híbrido -propio tanto del paisaje como de las humanidades- consideramos que se ha conseguido el objetivo fundamental de esta investigación: la identificación de paisajes estereotípicos o la utilización de la naturaleza o el medio cultural mediterráneo como expresión paisajística en textos de la antigua Grecia pertenecientes Homero y a la denominada tradición homérica y situados en los inicios de la Cultura Occidental.
Hemos ido descubriendo que, en el leguaje de la antigua Grecia, ni siquiera existía una palabra que expresara contundentemente lo que hoy conocemos como naturaleza e incluso –conociendo que grandes autores han afirmado que el pensamiento del pueblo heleno era ajeno a planteamientos paisajísticos- nos hemos atrevido al análisis de un buen número de aquellos textos y hemos terminado asumiendo que la naturaleza y el paisaje mediterráneo, tanto físicos como culturales, se constituyen en poderosas herramientas narrativas de aquellos primeros poetas, logógrafos, historiadores, filósofos y científicos, que conformaron la tradición homérica, que había iniciado el Poeta y cuyo objetivo fundamental era la educación moralizadora e identificadora con unos paisajes.
Abordamos la lectura y análisis de los textos griegos en el tiempo presente, después de más de dos mil quinientos años desde que fuesen escritos, en una civilización heredera, como es la nuestra, pero muy distante por el propio proceso evolutivo de la especie. Si olvidamos los avances sociales, culturales o tecnológicos y pensamos únicamente en las palabras, observando cómo han ido incorporándose a nuestro vocabulario -sucesivamente pero en tiempos muy largos- términos como naturaleza, geografía, paisaje y ecología, teatro, contemplación, mirada y emoción ¿Qué intenciones tenía y tiene la incorporación de la naturaleza en el hecho narrativo?, ¿son construcciones de paisajes? No tenían ni la palabra ni el género, pero cuando leemos esos poemas que nos invitan a contemplar, a mirar esos territorios que reconocemos como nuestros, como mediterráneos, sin saber dónde están, los sentimos nuestros, cercanos ¿no empieza, precisamente, en esa emoción el paisaje propiamente dicho? En la primera parte, se analiza la obra de Homero, identificando la selección que él mismo efectúa de espacios naturales o culturales estereotípicos del Mediterráneo para conseguir expresar sus ideas, transmitir un mensaje de una determinada manera y con un específico objetivo: crear arquetipos geográficos mediterráneos. Respondiendo a su papel de aedo-educador, utiliza los arquetipos de la naturaleza, de la geografía, de la polis, del paisaje mediterráneo como programa docente y unificador de los pueblos dispersos de la Hélade. La objetivación realizada con los propios depósitos de memoria irá fundamentando la creación y germen de Occidente.
En la segunda parte, en las obras analizadas hasta llegar a Apolonio (295–215aC), la objetivación nos ha ido acercando con mayor evidencia a la pintura. Quizás en textos anteriores como los de Mimnermo o Safo y, evidentemente en las Argonáuticas, nos acercaríamos a la «intención de provocar experiencias individuales de inmersión sensorial en paisajes concretos y significativos». Porque «el objetivo principal de una lectura experta de paisajes no puede ser otro que el de ofrecer unas claves espaciales, territoriales y perceptivas del ámbito en que se encuentran. La intención (de tal lectura) es la de provocar experiencias individuales de inmersión sensorial en paisajes concretos y significativos de tal ámbito para conducir —mediante unos relatos transmisibles— a unas interpretaciones in situ y a unas posibles artealizaciones de visu que subrayen los vínculos afectivos y los compromisos éticos de la sociedad con sus/los paisajes» .
Sin olvidar nuestro rico lenguaje y según el DRAE, la imaginación—en su primera acepción— es la «facultad del alma que representa las imágenes de las cosas reales o ideales». En la literatura, la objetivación es la base analítica de la construcción personal de una realidad ficticia que produce la imaginación en base a nuestro depósito de memoria.
Se irán recogiendo los resultados de esta labor investigadora para poder concluir con las afirmaciones hipotetizadas y, recordando a Edmund Burke —quien tras considerar que «un hombre que traspasa la superficie de las cosas, por mucho que se equivoque, abre el camino a otros, […]. Como soy sensato, no he dispuesto mis temas para aguantar la prueba de una controversia mal intencionada, sino de un examen moderado e incluso indulgente,…» —, salvando las distancias, solicitaría el mismo trato.
La mirada humana convierte cierto espacio en paisaje, por medio del arte una porción de tierra adquiere signo de cultura. .
Citando a Guillén , el paisaje se convierte en escenario y actor, objeto y sujeto, «motor de la narración», realidad física y emocional, íntimamente ligada a esta, la caracteriza, y no puede ser de otra forma, interactuando en un todo común y complejo, donde el autor se transformará en contemplador a través de su propia objetivación. En esta literatura homérica el paisaje es recurso y actor de un todo complejo indivisible, la obra de arte literaria cuyo fin ético es la enseñanza y la moralidad del pueblo heleno.
- English
Keywords: Objectification, Homeric, resource, landscape and culture.
The present thesis tries to approach a subject as complex as that of looking for the traces of landscape in the Homeric tradition. To this end and to make this approach, as well as facilitate the analysis of the landscape in the temporal development of Homeric literary narration, we approach to such heterogeneous sciences as painting or geography, in which the landscape fits with crystal clarity, but also to philology, psychology, cinema or theater, considered a priori as disciplines outside the subject of study.
With a hybrid method —typical of both the landscape and the humanities— we consider that the fundamental objective of this research has been achieved: the identification of stereotypical landscapes or the use of nature or the Mediterranean cultural environment as a landscape expression in texts of the ancient Greece belonging to Homer and the so-called Homeric tradition and located at the beginning of Western Culture.
We have been discovering that, in the language of ancient Greece, there was not even a word that forcefully expressed what we know today as nature and even —knowing that great authors have affirmed that the thought of the Hellenic people was alien to landscape approaches— we have dared to analyze a good number of those texts and we have ended up assuming that nature and the Mediterranean landscape, both physical and cultural, constitute powerful narrative tools of those first poets, logologists, historians, philosophers and scientists, who made up the Homeric tradition, which the Poet had started and whose fundamental objective was a moralizing education identified with landscapes.
We approach the reading and analysis of Greek texts in the present time, after more than two thousand five hundred years since they were written, in an inheriting civilization, such as ours, but very distant due to the evolutionary process of the species. If we forget social, cultural or technological advances and think only about words, observing how they have been incorporated into our vocabulary —successively but in very long times— terms such as nature, geography, landscape and ecology, theater, contemplation, gaze and emotion. What intentions did the incorporation of nature into the narrative fact have now and then? Are they constructions of landscapes? They had neither the word nor the genre, but when we read those poems that invite us to contemplate, to look at those territories that we recognize as ours, as Mediterranean, without knowing where they are, we feel them close to us, doesn't it precisely begin in that emotion the landscape proper? In the first part, Homer's work is analyzed, identifying the selection that he himself makes of stereotypical natural or cultural spaces of the Mediterranean in order to express his ideas, transmit a message in a certain way and with a specific objective: to create Mediterranean geographic archetypes. Responding to his role as aedo-educator, he uses the archetypes of nature, geography, the polis, the Mediterranean landscape as a teaching and unifying program for the dispersed peoples of Hellas. The objectification carried out with the memory deposits themselves will base the creation and germ of the West.
In the second part, in the works analyzed up to Apollonius (295–215 BC), objectification has brought us closer to painting with greater evidence. Perhaps in earlier texts such as those by Mimnermo or Safo and, evidently in the Argonáuticas, we would approach the «intention of provoking individual experiences of sensory immersion in concrete and significant landscapes». Because «the main objective of an expert reading of landscapes cannot be other than to offer spatial, territorial and perceptual keys to the environment in which they are found. The intention (of such a reading) is to provoke individual experiences of sensory immersion in specific and significant landscapes of that field to lead —through transmissible stories— to some in situ interpretations and possible visual artisations that underline the affective bonds and the ethical commitments of society with his / her landscapes» Without forgetting our rich language and according to the DRAE, the imagination —in its first meaning— is the "faculty of the soul that represents the images of real or ideal things." In literature, objectification is the analytical basis for the personal construction of a fictitious reality produced by the imagination based on our memory store.
The results of this research work will be collected in order to conclude with the hypothesized statements and, remembering Edmund Burke — who after considering that «a man who crosses the surface of things, no matter how much he makes mistakes, opens the way for others, […]. As I am sensible, I have not arranged my subjects to endure the test of a malicious controversy, but of a moderate and even indulgent examination,…»—, saving the distances, I would request the same treatment.
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