Análisis longitudinal de la relación entre depresión y agresión física y verbal en población infanto-juvenil

• Autores: Rodolfo Gordillo Rodríguez
• Directores de la Tesis: María Victoria del Barrio Gándara (dir. tes.), Miguel Ángel Carrasco Ortiz (dir. tes.)
• Lectura: En la UNED. Universidad Nacional de Educación a Distancia ( España ) en 2010
• Idioma: español
• Tribunal Calificador de la Tesis: José Bermúdez Moreno (presid.), Pedro Javier Amor Andrés (secret.), Lourdes Ezpeleta (voc.), María Forns-Santacana (voc.), María Vicenta Mestre Escrivá (voc.)
• Materias:
  • Psicología
    • Evaluación y diagnostico en psicología
• Enlaces
  • Tesis en acceso abierto en: e-spacio
• Resumen

  • Esta investigación explora la relación (o comorbilidad siempre que se muestre significativa) entre una alteración de carácter interiorizado como la depresión y otra de carácter exteriorizado como la agresión física y/o verbal. La muestra se compuso por 525 sujetos, con un rango de edad de 9 a 15 años, pertenecientes a diferentes colegios de la Comunidad de Madrid, a los que se les hizo un seguimiento durante tres cursos académicos en sus medidas de depresión (obtenidas a través del cuestionario de depresión infantil abreviado; CDI-S, Kovacs, 1992) y agresión física y verbal (obtenidas a través del cuestionario de agresividad física y verbal; Caprara y Pastorelli, 1993). Los resultados de este estudio han contrastado la existencia de una comorbilidad patogénica o sustantiva entre depresión y agresión, en la que las chicas tienen unos niveles de prevalencia mayores que los chicos. Igualmente, se ha puesto de manifiesto, cómo la depresión explica significativamente un porcentaje de variabilidad en las respuestas agresivas, al igual que la agresión, principalmente, la verbal, también explica cierta variabilidad de las respuestas depresivas, aunque hay que destacar la predicción que la afectación de la depresión a los 11 años tiene sobre la agresión verbal y conjunta (física más verbal) a los 11, 12 y 13 años. Además, los sujetos detectados como comórbidos a los 11 años presentan mayor cronicidad que aquellos sujetos que, por una parte, exhiben sólo niveles significativos de agresión y, por otra, también son comórbidos pero de inicio más tardío. Asimismo, hemos comprobado que el sexo no modula la presencia de sintomatología depresiva y agresiva cuando se analiza en sujetos comórbidos. Los resultados también han indicado como depresión y agresión se relacionan, no sólo directamente sino también indirectamente por su pertenencia a problemas exteriorizados e interiorizados, de amplio espectro. Por último, la relación entre los trastornos puede ser explicado por una causa subyacente a ambos, como los factores comunes de riesgo que comparten. En conclusión, los resultados indican la conveniencia de tener en cuenta a la agresión verbal en la comorbilidad entre depresión y agresión para establecer, en primer lugar, una nosología más adecuada de los trastornos psicopatológicos en niños y adolescentes y, con ello, poder desarrollar mejores tratamientos para aquellos afectados por esta comorbilidad depresivo-agresiva. Además, la mayor severidad y cronicidad mostrada por los sujetos comórbidos de 11 años, así como la potencia predictiva de la depresión sobre la agresión a esta edad, pone de manifiesto la importancia de la detección precoz para la prevención de la comorbilidad entre depresión y agresión. Por último, hay que tener en cuenta la afectación diferencial que los factores de riesgo comunes a ambas alteraciones tienen por sexo, donde las chicas se ven más afectadas en depresión que los chicos.