Resumen de Efectividad del consejo para dejar de fumar combinado con la discusión detallada de los resultados de la espirometría por parte del médico de atención primaria sobre el hábito tabáquico en adultos fumadores
María del Mar Rodríguez Alvarez
Antecedentes: El abandono del hábito tabáquico es crucial en la prevención de la morbilidad prematura, la discapacidad y la mortalidad en todo el mundo. La eficacia del abandono del tabaco supera cualquier otra intervención para reducir al mínimo el riesgo de enfermedades crónicas cardíacas y respiratorias. De no intervenir en este problema, las proyecciones futuras son alarmantes. El consejo médico aislado ha resultado efectivo para modificar el hábito tabáquico en un gran número de fumadores, pero solo una pequeña proporción se mantienen abstinentes después de un año. Según datos recientemente publicados, la demostración de obstrucción al flujo aéreo mediante espirometría unida al consejo antitabáquico incrementaría el porcentaje de éxito hasta un 16,5%, haciéndolo comparable al que se obtiene utilizando agentes farmacológicos. Queremos evaluar la efectividad del consejo para dejar de fumar combinado con la discusión de los resultados de la espirometría por parte del médico de atención primaria sobre el hábito tabáquico en adultos fumadores.
Material y Métodos: Estudio de intervención con grupo control aleatorio realizado en 6 centros de Atención Primaria de la región sanitaria del Barcelonès Nord i Maresme de Cataluña durante 2005-2008, con un periodo de seguimiento de 2 años. Se incluyeron 376 fumadores, mayores de 18 años, que consultaron a su médico de atención primaria por cualquier motivo. A todos los participantes, en la visita de selección se les realizó una serie de pruebas (espirometría con prueba broncodilatadora, peak expiratoty flow rate, test de dependencia al tabaco, test de motivación para dejar fumar y cuestionario estructurado sobre datos sociodemográficos, hábito tabáquico, sintomatología respiratoria, etc.). Se les citó después para una visita concertada por parte de su médico de atención primaria donde se les dió consejo breve y estructurado para dejar de fumar combinado con una discusión detallada de los resultados de la espirometría. Posteriormente se aleatorizaron informativamente y se citaron para las visitas de seguimiento a los tres, seis, doce y 24 meses. Al grupo control se les dió consejo breve estructurado y al grupo de intervención consejo breve asociado a la discusión detallada de los resultados espirométricos obtenidos en la visita de selección. En la visita realizada al año de seguimiento al grupo de intervención se les hizo la misma intervención que se les hizo en la visita 0 y al grupo control solo el consejo breve estructurado para dejar de fumar. Se comprobó el abandono del hábito tabáquico mediante el test del monóxido de carbono.
Resultados: 173 en el grupo intervención y 188 en el grupo control Ambos grupos han resultado comparables. Al año de seguimiento el 9,8% de los fumadores del grupo control y el 15,6% del grupo intervención eran ex fumadores, cifra que se incrementó al 13,4% y 22,4% respectivamente (p<0,05). En el análisis multivariante las variables que se han asociado con una mayor probabilidad de abandono fueron una mayor edad, una mayor motivación y presentar un grado grave de EPOC. 20,6% EPOC no conocido, 61,2% leves y 5% graves.
Conclusiones: La utilización periódica de la de la discusión detallada de los resultados obtenidos mediante la realización de una espirometría en población fumadora se ha mostrado efectiva, aumentando las tasas de abandono. La prevalencia de la EPOC no diagnosticada sigue siendo elevada.
