Resumen de Bases ecológicas para la elaboración de un plan de recuperación de la población de milanos reales, milvus milvus, en menorca
La población reproductora de milano real ha sufrido un fuerte descenso en las Islas Baleares desde finales de los años 80, siendo mayor en la isla de Menorca. Mediante esta tesis se trata de establecer los parámetros demográficos que permitan una gestión eficaz.
La población reproductora de milano real ha sufrido un fuerte descenso desde finales de los años 80, descenso global estimado en un 94%, con una tasa negativa de crecimiento anual del -15%. La población ha pasado de 135 parejas reproductoras a finales de los 80 hasta menos de 10 parejas siguiendo la misma tendencia observada en todo su rango de distribución mediterráneo. Igualmente la fracción no reproductora de la población, formada por un 38-71% de la población, ha seguido la misma tendencia. La población parece sedentaria sin aporte de ejemplares exteriores, aunque un pequeño porcentaje de ejemplares se dispersa hasta la vecina isla de Mallorca durante los primeros años de vida, volviendo de nuevo a criar a Menorca.
Mientras que la elección del hábitat de cría viene regulada por la fisiografía del terreno (usos del suelo, fronteras y estructura de la vegetación) y factores ligados al grado de humanización, la elección del hábitat por parte de los ejemplares inmaduros está condicionado por factores ligados a la alimentación. Así, mientras que los adultos buscan para criar mayor cobertura de bosque, una mayor heterogeneidad del hábitat y zonas despejadas, los inmaduros seleccionan positivamente el basurero, más kilómetros de carreteras y menor distancia al dormidero. Las diferentes necesidades entre adultos e inmaduros muestran que la conservación de una especie requiere tener en cuenta todos los aspectos relacionados con el hábitat, pues mientras unas características pueden beneficiar a un segmento de la población el otro segmento puede tener necesidades diferentes.
Aunque el territorio menorquín conforma un hábitat idóneo para una especie como el milano real que necesita zonas boscosas no muy grandes para criar rodeadas de campos abiertos para cazar y con una actividad ganadera que le proporciona la carroña necesaria, los recientes cambios en el modelo económico de la isla, centrados mayoritariamente hacia el turismo, y con un continuo abandono del campo que ha pasado a ser una actividad secundaria, así como un incremento en infraestructuras como urbanizaciones a lo largo de la superficie insular, está incidiendo negativamente sobre la especie limitando el territorio útil en una isla ya de por sí pequeña (700 km2) y que sin duda está disminuyendo la capacidad de carga. En este sentido la existencia de un gran número de urbanizaciones a lo largo de toda su superficie tiene una gran importancia en la elección del uso del hábitat.
Mientras que los parámetros reproductores son normales para la especie y la supervivencia inmadura un poco baja, los valores de supervivencia adulta se alejan mucho de los normales. Así, la modelización de la evolución de la población con los parámetros obtenidos muestra un descenso estimado en un 16% anual y una probabilidad de extinción del 100% en 100 años, con un tiempo medio de extinción de 18 años. Los factores que influyen más sobre los parámetros demográficos son de tipo antrópico y centrados principalmente en el uso de cebos envenenados para el control de predadores, la electrocución y los disparos.
Los análisis de sensibilidad muestran que la tasa de crecimiento de la población es ocho veces menos sensible a cambios en la supervivencia inmadura que en la supervivencia adulta y siete veces menos sensible a cambios en la productividad. Por ello para tratar de incrementar la población se debería actuar incrementando la supervivencia adulta, ya que es el parámetro más sensible, y actuando sobre el control del uso de venenos, el aislamiento de tendidos eléctricos y la divulgación.
Durante el periodo 2000-04 se ha llevado a cabo un programa de gestión poniendo en marcha las recomendaciones obtenidas en los modelos. Aunque es pronto para ver resultados y no se han observado diferencias significativas en los parámetros demográficos, tanto la supervivencia inmadura como la adulta se han incrementado, sobre todo en los dos últimos años, lo que está provocando un cambio de tendencia en la población que ha pasado de 8 parejas reproductoras a 15 en el año 2004.
Los modelos demográficos obtenidos al aplicar los parámetros demográficos de los últimos años muestran una tasa de crecimiento positiva y una tasa de extinción de solo un 3% en 100 años. La causa de mortalidad más frecuente, el consumo de cebos envenenados, ha desaparecido, no habiéndose detectado ningún caso desde el año 2000.
