La malnutrición es una de las complicaciones más frecuentes de la cirrosis hepática. En este contexto, una de sus causas es la alteración del metabolismo energético. El hipermetabolismo se asocia con un mayor riesgo de morbimortalidad en la cirrosis. Sin embargo, no conocemos completamente sus causas, su mecanismo fisiopatológico ni los factores asociados. La mayoría de los estudios publicados hasta la fecha se focalizan en un solo posible factor aislado, y hay pocos trabajos que comparen directamente a los pacientes hipermetabólicos y no hipermetabólicos, con resultados contradictorios.
El objetivo del estudio fue identificar los factores asociados al estado hipermetabólico en la cirrosis. En primer lugar se realizaría un estudio de función hepática, composición corporal, utilización de sustratos energéticos y niveles sanguíneos de hormonas implicadas en el metabolismo en un grupo de varones cirróticos, comparándolo con un grupo control de sujetos sanos. En segundo lugar, se compararían todos esos factores entre los pacientes cirróticos hipermetabólicos y los no hipermetabólicos. Y finalmente se identificarían cuáles de esos factores se asociaban de forma independiente al hipermetabolismo.
El estudio prospectivo incluyó a 48 pacientes varones cirróticos ambulatorios y 9 controles sanos, todos ellos mayores de edad. Se excluyeron a todos los sujetos con enfermedades o circunstancias ajenas a la cirrosis que pudieran interferir en las determinaciones investigadas. Específicamente, no se incluyeron pacientes con hepatocarcinoma, ascitis o edemas. El estudio energético se realizó mediante calorimetría indirecta, obteniéndose el gasto energético en reposo (GER) y los porcentajes de oxidación de hidratos de carbono, lípidos y proteínas. El GER teórico se calculó mediante la ecuación de Harris-Benedict. Se definió hipermetabolismo como un GER superior en un 15% al GER teórico. La composición corporal se estudió mediante DXA, obteniéndose los valores de masa grasa (FM) y masa libre de grasa (FFM). La función hepática, los niveles de hormonas y el resto de bioquímica habitual se obtuvieron a partir de muestras de sangre y orina.
Respecto a los controles sanos, los pacientes cirróticos presentaron un GER significativamente elevado, tanto en valor absoluto como ajustado por FFM. Un 58% fueron clasificados como hipermetabólicos y un 42% como normometabólicos. Los paciente cirróticos presentaron niveles significativamente mayores de insulina, insulinoresistencia estimada mediante el índice HOMA-IR y leptina ajustada por FM, y niveles significativamente menores de IGF-I.
Al comparar a los grupos de pacientes cirróticos hipemetabólicos y no hipermetabólicos no se encontraron diferencias en cuanto a edad, causa de la cirrosis, función hepática, presencia de ascitis o signos de sobrehidratación, ni porcentaje de pacientes en tratamiento con diuréticos, betabloqueantes o portadores de TIPS. En comparación con los no hipermetabólicos, los pacientes hipermetabólicos presentaron menor peso, menor índice de masa corporal, mayor porcentaje de FFM, menor cociente respiratorio no proteico (confirmado por un mayor porcentaje de uso de lípidos y un menor uso de hidratos de carbono como fuente de energía), mayor insulinemia, mayor insulinoresistencia estimada mediante HOMA-IR y menores niveles de leptina ajustada por FM. Todas las diferencias fueron estadísticamente significativas.
Se realizó un análisis multivariado en donde se comprobó que solo el índice HOMA-IR, la leptina ajustada por FM, y el porcentaje de FFM se asociaban de forma independiente a la presencia de hipermetabolismo en este grupo de varones cirróticos sin hepatocarcinoma. Se sugirió que el uso de estas variables podría permitir identificar a un grupo de pacientes hipermetabólicos sobre los que, por su peor pronóstico, podrían planificarse modificaciones en el seguimiento o intervenciones dietéticas, nutricionales o farmacológicas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados