Un gran número de los desfibriladores automáticos implantados en la actualidad son dispositivos bicamerales.
Esta práctica se ha justificado por un supuesto incremento en la especificidad a la hora de discriminar entre ritmos rápidos supraventriculares y ventriculares y como resultado de las indicaciones de estimulación bicameral que afectan según series retrospectivas a un elevado número de estos pacintes. La tendencia de la mayoría de los centros consiste además en la programación de varias ventanas de programación en estos dispositivos.
Desde que en 1991 se realizase el primer implante de un desfibrilador automático en nuestro centro, nuesto gurpo ha seguido una política de implantacion de desfribiladores monocamerales y la programación de una única ventana de terapia ha sido la norma salvo en pacientes con arritmias muy bien toleradasa y facilmente eleminables con sobreestimulación.
El objetivo principal de este trabajo consiste en demostrar que la implantación de desfribriladores monocamerales programados con una única ventana de terapia constituye un abordaje sencillo, eficaz y con una baja comorbilidad frente a la práctica clínica habitual consistente en estrategias más complejas.
Para ello se han analizado los siguientes puntos: las descargas inapropiadas sobre TPSV o ritmo sinusal, los episodios de taquicardia ventricular (TV) fuera de rango, los episodios sincopales y causa no filiada y potencialmente atribuibles a TV, la necesidad de reprogramación de los dispositivos y la necesidad de estimulación antibradicardia.
Dada la extensión de la serie y su largo periodo de seguimiento se establecieron los siguientes objetivos secundarios. Determinar las complicaciones agudas y tardías, realizar un análisis de supervivencia y analizar las diferencias entre subgrupos, determinar las cuasas de muerte, realizar un análisis de las terapias otorgadas y analizar la presencia de eventos entre determinados sub
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados