Resumen de Influencia de la biomecánica en el remodelado óseo tras la implantación de un vástago femoral anatómico
La colocación de un vástago protésico en el fémur produce un efecto, denominado remodelado óseo adaptativo, que se caracteriza por una disminución de la densidad mineral ósea del hueso, especialmente acusada con los vástagos no cementados. Se han señalado como causantes del remodelado factores mecánicos y biológicos. Los sucesivos diseños de artroplastia de cadera no cementada han pretendido evitar este efecto indeseable. En este estudio investigamos el comportamiento, a largo plazo, del modelo de vástago no cementado ABG I sobre el remodelado óseo adaptativo. Para ello, determinamos mediante DEXA las variaciones de masa ósea que sufre el fémur proximal, tras la colocación del vástago ABG I, con un seguimiento de 10 años. Por otra parte, determinamos las variaciones mecánicas a que se ve sometido el fémur tras la colocación del implante mediante simulaciones con elementos finitos. La simulación mecánica incorpora los valores de masa ósea obtenidos en el seguimiento densitométrico. La correlación existente entre las variaciones de masa ósea y de tensiones mecánicas nos permitirán determinar la importancia del factor mecánico en la producción del remodelado adaptativo.
Nuestros resultados demuestran que el remodelado adaptativo está determinado principalmente por factores mecánicos, siendo modesta la influencia de los factores biológicos. El modelo de vástago ABG I, en contra de las previsiones con que se diseñó, produce un efecto de embudo en la transmisión de las cargas que no evita el puenteo de fuerzas. En consecuencia, el remodelado adaptativo determina una pérdida media de masa ósea del 28% en las zonas 1 y 7 de Gruen, sin embargo no se producen cambios de la mineralización en el resto de las zonas estudiadas. Este proceso remodelativo se completa al final del primer año tras la colocación del vástago, excepto en la zona 7 de Gruen que sufre una pérdida continuada de masa ósea a lo largo de los 10 años de seguimiento. Finalmente, constatamos también que las variaciones de densidad ósea atribuibles a la involución fisiológica, en pacientes con edades próximas a los 60 años, han sido escasas durante el seguimiento a 10 años, y no han influido en el remodelado adaptativo periprotésico.
