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El Doctor Don José de Flores. Una vida al servicio de la ciencia

  • Autores: José Aznar López
  • Directores de la Tesis: Gabriel Sánchez de la Cuesta y Gutiérrez (dir. tes.)
  • Lectura: En la Universidad de Sevilla ( España ) en 1958
  • Idioma: español
  • Número de páginas: 262
  • Enlaces
    • Tesis en acceso abierto en: Idus
  • Resumen
    • Las biografías de los grandes nombres enseñan en su conjunto, tanto o más que el estudio de hechos desligados, sin conexión ya con quien los hizo realidad. Por esto, una figura médica que desarrolló sus actividades en el filo de los siglos XVIII y XIX va a ocupar el tema central de este trabajo. Pretendo recoger lo más aleccionador de la vida de un hombre que, laureado en sus actividades dentro de la Medicina, supo conseguir tiempo y espacio para alcanzar en otras ramas del saber humano, gloria bastante para ser reverenciado también por ellas.

      Al Doctor José de Flores, o José Felipe Flores –del que se tiene escaso conocimiento en España-, guatemalteco de nacimiento, hay que llamarle español por unas cuantas razones. Fue español, porque Guatemala era una provincia española y española su política en la época de Flores. Fue español, porque una gran parte de su vida, precisamente la más interesante, se desenvolvió en la metrópoli. Y español, porque lo fueron el Rey y el Gobierno a cuyo servicio desplegó su ingenio.

      Iniciados sus trabajos –revolucionarios por entonces- en las postrimerías del reinado infeliz de Carlos IV; madurados en plena lucha contra Napoleón y culminados, junto con su vida, durante el no menos calamitoso reinado de Fernando VII, José de Flores es un ejemplo vivo de entrega total a la ciencia, de renuncia absoluta a las comodidades personales en beneficio de la Humanidad, y de consagración a la hermosa tarea de la enseñanza.

      Una Cátedra por oposición, una clientela floreciente y el Protomedicato de un Reino, hubieran invitado siempre a dejar correr los años, sabiéndose admirado, reverenciado y estimado en todos los medios sociales. Flores –espíritu excepcional- no se conformó con llegar a la meta de esa máxima aspiración para cualquier médico, de cualquier tiempo.

      Después de haber revolucionado los estudios de Medicina en Guatemala, fundamentalmente los anatómicos –considerados por él, como la base formativa de buenos médicos prácticos-, consigue su pase a España (“para estudiar y observar a los grandes sabios”, dice él; para encontrar amplio campo en que desenvolver su extraordinario intelecto, diríamos nosotros), y en la Madre Patria consigue desarrollar sus geniales ideas, desgraciadamente perdidas en su mayoría, por la escasa protección oficial.

      Moderno Galileo, el doctor Flores investiga sobre óptica, proponiendo y consiguiendo modificaciones en los telescopios de Herschell. Se ocupa de problemas sanitarios tan importantes, como el de la conservación de los alimentos sin el empleo de la salazón. Adquiere prestigio en sus trabajos de Historia Natural, encargándose de la repoblación piscícola de lagos de su país. Y como culminación de estos esfuerzos por si no hubieran sido suficientes los trabajos de anatomía efectuados en su cátedra, que le valieron el título de Médico de Cámara, la poderosa mente de este genio, idea, adelantándose a su tiempo, aplicar a los barcos la fuerza hidráulica para facilitar la navegación “sin xarcias ni arboladura” –dice él- y sin temor a tempestades ni a calmas.

      Este trabajo pretende ser, no la simple relación de aquellos esfuerzos estériles por la escasa protección dispensada, una exposición documentada que lleve al conocimiento de la clase médica española una figura que reclama urgentemente un puesto de honor entre las más laureadas.

      CONCLUSIONES 1. Con la exposición de la biografía del médico hispano-americano JOSE DE FLORES, protomédico de Guatemala, queda presentada al acervo de la Historia de la Medicina, una figura interesante de la Ciencia, escasamente conocida hasta ahora.

      2. Se comprueba que JOSE DE FLORES fue el primer médico de Guatemala que introdujo en aquel Reino la vacunación antivariólica.

      3. Del presente estudio biográfico se desprende su gran afán innovador en los estudios universitarios de Medicina, llevado a cabo reformas más profundas que las propugnadas por otros (Fray Aleas, Francos y Monrroy).

      4.Consideramos a JOSE DE FLORES como el padre de la ANATOMIA DESCRIPTIVA sobre figuras anatómicas articuladas para suplir las dificultades de la disección. Rebatimos por tanto, la idea hasta ahora mantenida de la paternidad en este aspecto del abate Fontana, cuyas estatuas demostramos son posteriores a las de FLORES.

      5. Presentamos algunos trabajos de tipo higiénico, deontológico, naturalista (botánico, piscícola) y literario, que consagran a Flores como un hombre de méritos diversos.

      6. Completando las noticias dadas por Martínez Durán, al presentar a Flores como primer protomédico de Guatemala con carácter oficial, demostramos cual fue la causa inmediata de la creación del tribunal de Protomédicato: el pleito contra el curandero Pinzón por haber causado la muerte de un paciente asistido antes por el doctor Esparragoza.

      7. Demostramos como ha de considerarse Protomédico electro interino de Guatemala a Don Juan Carrera y Capdevila, estudiando las razones de su nombramiento a propuesta de la Academia de Medicina Práctica de Barcelona y la renuncia posterior de Capdevila.

      8. Presentamos a Don Matías Calderón como segundo Protomédico interino efectivo del Reino de Guatemala.

      9. Presentamos a José de Flores como un innovador en correcciones de lentes astronómicas, siendo precursor en la construcción de dichas lentes de vidrio y precursor también en la corrección de la aberración cromática mediante combinaciones originales de lentes y agua.

      10. Reclamamos para José de Flores un puesto en la vanguardia de los médicos que recomendaron la alcoholterapia en las enfermedades pútridas, pues sus ideas, totalmente empíricas, son anteriores al uso de la poción de Todd para el tratamiento de dichas enfermedades.

      11. Demostramos como el doctor Flores se ocupó de la conservación de alimentos, frescos, para prevenir las diversas enfermedades que se contraían por este motivo en los largos viajes por mar. Estudiamos su método de conservación por medio del alcohol mezclado con agua haciendo una crítica del mismo y al que consideramos rebasado por otros medios conservadores.

      12. Damos a la publicidad una Memoria inédita escrita por Flores explicando su método para conservar pescados y otros alimentos.

      13. Consideramos a José de Flores como el primer hombre de ciencia español a quién se le ocurrió aplicar la fuerza hidráulica a los buques en España, ideando un barco movido por esta energía, que presentó a la Junta de Marina.

      14. Por hallar en nuestras investigaciones escritos demostrativos de la anterior conclusión y por otro lado, los puntos siguientes: a) una coincidencia curiosa de fechas entre la presentación del proyecto de Flores y la aparición del primer buque de vapor español; b) la desvalorización del papel de Flores, bastante bajo en aquellos momentos (que hubiera podido ser la causa de no hallar su nombre ligado a este invento) y c) el hallazgo de una realidad barco de vapor sin inventor conocido en España, sustentamos la hipótesis de que el primer buque de vapor español, el “Rey Fernando”, construido en Sevilla, fue el fruto del proyecto original del Doctor Flores.


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