Como mueve Dios el mundo: la operación de Dios en el obrar natural de las criaturas, especialmente en la voluntad humana

• Autores: Jesús Martínez García
• Directores de la Tesis: Enrique Moros Claramunt (dir. tes.)
• Lectura: En la Universidad de Navarra ( España ) en 2000
• Idioma: español
• Tribunal Calificador de la Tesis: Luis Fernández José (presid.), Sergio Sánchez-Migallón Granados (secret.), Mariano Artigas Mayayo (voc.), Enrique Moros Claramunt (voc.), José Ángel García Cuadrado (voc.)
• Materias:
  • Filosofía
    • Filosofía general
      • Teología natural
    • Sistemas filosóficos
      • Filosofía moderna
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• Resumen

  • Este estudio se centra en la investigación del pensamiento de Tomás de Aquino en torno al influjo de Dios en el movimiento de las criaturas. El Doctor Angelico trata expresamente este tema en la suma de Teologia, I, q 105,a.5, Suma Contra Gentiles,III, 67, y en la cuestion disputada De Potentia, 3,7. Expresa que Dios obra de cinco maneras en todo operante: en cuanto que le da la virtud operativa, en cuanto que la conserva, en cuento que la aplica a obrar, en cuanto que causa el ser de sus efectos y en cuanto fin de todo obrar.

    Para ello establece una distinción fundamental: el sujeto que obra, y la virtud por la que se obra. Y dice que son las criaturas las que actuan con inmediación de sujeto, pero lo realizan en virtud de dios, quien obra inmediatamente en todo agente no como sujeto, sino por su virtud.

    Sus interpretes, ya desde Egidio Romano, entendieron que para el Aquinate, dios obra con inmediación de sujeto, lo cual llevó a plantear una polémica en el siglo XVI sobre como debia entenderse, para conciliar el obrar divino con el obrar creatural;polemica que volvió a plantearse en las revistas de Filosofia a comienzos del siglo XX. El profesor Stufler,aportó una nueva interpretacion de los textos del Doctor Angelico. Nos ha parcido la interpretacion más adecuada a su pensamiento y es la que se ha seguido en este trabajo, aunque modificándola en algunos aspectos.

    La tesis que mantenemos es que dios nos mueve a las criaturas para causar su movimiento, entendiendo su influjo como un concurso eficiente, sino que es la causa de sus movimientos, y este influjo es de una naturaleza intencional.