El "Proyecto Genoma Humano", como todo nuevo avance cientifico, ha de ser fomentado en cuanto supone una profundización en el conocimiento. No obstante, cuando se empieza a vislumbrar la posibilidad de consecuencias devastadoras para la humanidad, es imprescindible el establecimiento de controles éticos que, con una finalidad orientadora, sirva para analizar las implicaciones morales de los nuevos descubrimientos. Además, el análisis de los valores morales ha de completarse con controles sociales, a través de instituciones pluridisciplinares de expertos, y con normas legales. También se hace imprescindible una nueva regulación del derecho de patentes, que trate específicamente la posibilidad de patentar fragmentos de materia viva humana, especialmente de genes humanos. La trascendencia de esta problemática ha llevado a la Unión Europea a intentar aprobar una directiva comunitaria en este ámbito, directiva que ha quedado rechazada finalmente por el voto en contra de los eurodiputados.
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