La caja del estado no es dinero puesto que se trata de papel moneda en poder de su emisor no tiene ningún sentido patrimonial. El tesoro cuando cobra no recibe nada con sentido económico ni lo entrega cuando paga; es un mero intermediario en anulación y creación de dinero. La clase de intervenciones del tesoro en el mercado del dinero y del crédito son altamente cuestionables y en cualquier caso debiera ser otra institución la que tuviese atribuidas tales competencias. La segunda parte es una descripción del tesoro público español y la tercera una crítica de dicha realidad a tenor de los principios asentados en la primera.
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