Ayuda
Ir al contenido

Dialnet


El yacimiento ibérico de cerro Lucena, Enguera (Valencia)

  • Autores: Juan José Castellano Castillo
  • Directores de la Tesis: José Pérez Ballester (dir. tes.)
  • Lectura: En la Universitat de València ( España ) en 2016
  • Idioma: español
  • Tribunal Calificador de la Tesis: Alberto José Lorrio Alvarado (presid.), Consuelo Mata Parreño (secret.), Helena Bonet Rosado (voc.)
  • Programa de doctorado: Programa de Doctorado en Geografía e Historia del Mediterráneo desde la Prehistoria a la Edad Moderna por la Universitat de València (Estudi General)
  • Materias:
  • Texto completo no disponible (Saber más ...)
  • Resumen
    • El asentamiento de Cerro Lucena se levanta en un contrafuerte de la Sierra de La Plana, con una altitud relativa sobre el llano de 110 m. Tiene una forma alargada y se orienta en sentido noreste-suroeste. En la cima del extremo noreste se localizan, en 769 m2, las estructuras descubiertas a lo largo de nueve campañas de excavación. La superficie estimada del poblado es de 2,7 ha.

      Las campañas de 2003 a 2010 nos han permitido reconocer nueve fases constructivas, entendiendo como tales los distintos momentos en los que se realizan modificaciones en la arquitectura y el urbanismo del poblado. Estas fases constructivas se pueden agrupar en tres periodos de ocupación. El primero y más antiguo se fecha en el momento de la fundación, en el s. IV a. C y se corresponde con la Fase Constructiva I. El segundo Periodo, incluye las Fases II-VII; con un terminus a. q. de mitad del s. I a. C. El tercer periodo de ocupación lo integran las Fases VIII-IX.

      Se han identificado 40 departamentos. Gracias al estudio de su ubicación e interrelación se han reconocido: cuatro manzanas; una calle longitudinal y tres calles perpendiculares La cerámica ibérica es el elemento más común del registro material. Dentro del conjunto hemos contabilizado un NMI de 3141 vasos: 2722 pertenecientes a la Clase A y 419 Clase B, documentándose 32 formas. La mayor variedad se da en el conjunto de la Clase A con 29 mientras que en la clase B solo se documentan 3. Estudiamos un conjunto de 58 fragmentos cerámicos sobre los que se puede observar una decoración compleja. En algunos de ellos se combinan motivos procedentes del área del sureste típicos del estilo simbólico y otros vinculados al área edetana. Su confluencia y la progresiva documentación de casos similares nos lleva clasificarlos en un nuevo estilo, individualizado recientemente, denominado simbólico levantino. El marco cronológico del mismo se fijaría entre los ss. II-I a. C.

      Las cerámicas importadas de Cerro Lucena suman un total de 128 piezas, lo que supone sólo un 4% del total de cerámicas del yacimiento.

      Podemos afirmar que Cerro Lucena con su tamaño, urbanismo y cultura material se puede clasificar dentro de la categoría de oppidum.

      La presencia de cerámicas importadas, ponderales, lingotes de plata, epigrafía, etc. Son objetos que no están hablando de una economía compleja propia de núcleos ibéricos importantes donde los intercambios intercomarcales y regionales es algo habitual.

      En La Vall de Enguera en época ibérica, entre los siglos IV y I a. C., existía un poblamiento estructurado y disperso, al pie de un oppidum principal, Cerro Lucena. Hemos identificado 13 yacimientos que tendrían como función principal la explotación de los recursos agropecuarios disponibles en su entorno. Una red de caminos articularía el territorio y uniría La Vall con las comarcas vecinas: el valle del Canyoles y los llanos de Almansa.

      En Cerro Lucena debió habitar una comunidad que fue capaz de concebir y materializar integralmente desde sus comienzos un asentamiento, que clasificaríamos dentro de un segundo escalón dentro del patrón de asentamiento central. Dicha sociedad adapta a la orografía del cerro los equipamientos comunitarios que les son imprescindibles para su supervivencia y progreso y planifica un urbanismo regular que hasta la fecha parece basarse en la presencia de calles y manzanas de dimensiones muy similares, con todo lo que esta realidad significa a la hora de invertir y coordinar trabajos. Sin duda debió existir una figura o figuras que dirigieran o coordinaran el esfuerzo comunitario con lo que podemos proponer la existencia de una jefatura local, la cual debido al estado de la investigación no podemos concretar en su forma.


Fundación Dialnet

Dialnet Plus

  • Más información sobre Dialnet Plus

Opciones de compartir

Opciones de entorno