El escultor borgoñón Felipe Bigarny se estableció en Burgos. Su primera obra de 1498, fue el Relieve del Camino del Calvario, en la girola de la catedral de Burgos. Desde entonces desarrollo una carrera fructífera para los condestables de castilla, reyes, obispos y mercaderes en obras tan importantes como la capilla de los condestables (catedral de Burgos), el retablo de la capilla real de Granada y la sillería de coro de la catedral de Toledo. Su técnica de la escultura le permitió una originalidad tal que de las fuentes creativas mas diversas elabora un lenguaje personal, tan distante de los maestros del gótico como de los del renacimiento. Mantuvo tres talleres abiertos simultáneamente en Burgos, Toledo y Peñaranda de Duero. Además, para realizar sus trabajos dispersos por ciudades de España, creo talleres autónomos. Existe, pues, un complejo entramado de trabajos y artistas que deben ser considerados en un segundo termino, como algo independiente del diseño. Bigarny es uno mas de los escultores que cambian tanto de estilo que hoy nos parece difícil conciliar las obras de sus diversas etapas.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados