Ayuda
Ir al contenido

Dialnet


La retórica de la pureza, la transparencia, el vacío y la nada

  • Autores: Carmen Lage Veloso
  • Directores de la Tesis: Juan Luis Moraza (dir. tes.)
  • Lectura: En la Universidade de Vigo ( España ) en 2017
  • Idioma: español
  • Tribunal Calificador de la Tesis: Rosa Brun Jaén (presid.), Armando Montesinos Blanco (secret.), Mª Teresa Blanch Malet (voc.)
  • Materias:
  • Enlaces
  • Resumen
    • español

      La retórica de la pureza, la transparencia, el vacío y la nada, indaga en la detección de algunas de las ideas recurrentes a través de las cuales se ha interpretado la Modernidad y la Postmodernidad, para averiguar el andamiaje de construcción de la realidad que vertebran.

      Las democracias contemporáneas no implican eliminación de la disensión ni evitan la tendencia del poder al autoritarismo. Las lógicas de dominación dependen de una logística de los símbolos. Los sistemas simbólicos diseñados para para dominar lo indominable y ordenar la realidad se han ido perfeccionando progresivamente hasta su casi total invisibilización. Y todo ello se produce mediante una estrategia con apariencia de generosa apología de libertad.

      Tras la absorción continuada por el orden institucional vigente de las estrategias transgresoras de las vanguardias del siglo XX, los discursos vinculados con lo sagrado y lo espiritual de los que tradicionalmente se habían apropiado entidades históricamente autoritarias e incorpóreas, son enarbolados por la misma Modernidad que había cancelado cualquier resonancia trascendental. La postmodernidad sentencia después la muerte de los grandes relatos pero quizás la ausencia de relatos es el gran relato. En ese proceso de crisis de la realidad homogénea, ¿cómo se tejen los constructos legitimadores cada vez más sutiles y sumergidos que el Estado seductor pone en juego? Las exigencias estéticas de pureza lingüística, de pureza en las artes, ¿de dónde vienen esas ideas? La mezcla de elementos procedentes de distintos códigos, disciplinas, culturas...etnias, ¿por qué produce un sentimiento de ultraje? ¿El ornamento es un crimen? ¿La forma sigue la función? ¿Menos es más? ¿Cómo se articula este discurso en un mundo donde lo distinto ya no es distante? Desde aproximadamente la segunda mitad del siglo diecinueve, el ornamento ha sido sometido a críticas sin precedentes. Pero el elemento forcluído, retorna constantemente, desafiando el dogmatismo purista. Finalmente, desde el punto de vista de la postmodernidad, el ornamento no es un simple suplemento, sino la expresión de una fuerza vital.

      La pureza y sus implicaciones teológicas y también su versión secularizada como negación de lo accesorio, de lo innecesario, como proceso de ascesis que conduce a la pureza reificada de la técnica moderna. Ambos estadios están interconectados y no son contradictorios.

      La transparencia, la ficción de que no hay nada oculto, de que todo se ve, es uno de los valores más difundidos en el mundo globalizado. Sus atributos son deseados por los gobiernos y las corporaciones multinacionales. Una vez desplegados todos los medios para generar la idea de una realidad transparente, el nuevo relato se presenta a sí mismo como libre de todo mito, como saber sin mediaciones. La transparencia es una cualidad que permite ver a través de un cuerpo pero a su vez lo invisibiliza sutilmente. Inicialmente al servicio de la lucha contra el oscurantismo y las políticas abusivas, la transparencia se convierte a partir de un determinado momento en un perfecto pretexto para la vigilancia. Los ciudadanos somos cada día más transparentes para un poder cada día más difuso. La transparencia, ¿conquista o regresión? ¿Todo debe ser revelado? ¿La posibilidad de poder ver todo implica que todo pueda verse? El vacío y la nada vuelven a tener fuertes resonancias teológicas. ¿La representación del vacío responde al vacío de la representación? ¿Es la reminiscencia del sublime romántico? Y también, el vacío como ideal de sutilidad, de la capacidad de ser receptivo y maleable. La forma ideal para ser utilizada como comodín para el discurso que se quiera legitimar.

      En los últimos tiempos de crisis del modelo moderno, el interés por lo sublime se ha intensificado en la filosofía, la historia y la estética. Lo sublime es lo que se levanta al borde del límite. Y en ese discurso, la contemporaneidad, erigida sobre el fracaso del saber en sus pretensiones de universalidad arrastra a la visión en su caída hacia el vacío y la elipsis. Siempre hasta ahora relacionado con la divinidad y lo absoluto, lo sublime, queda ahora al servicio de la idea de progreso para legitimarlo. Como había dicho el filósofo de Frankfurt: no se puede escribir poesía después de Auschwitz. Sin embargo, el arte es más necesario que nunca. Aunque sea con respiración asistida, el arte debe reconstruir una dimensión de la experiencia que quedaría vacía con su desaparición.

      Por último, la nada es otro gran relato legitimador cuya finalidad inmovilista tiende a conservar inalterable la realidad. En las sociedades barrocas se identificó con el fin, con la muerte, y en las sociedades contemporáneas, el fin de la historia juega el mismo papel. Se genera el mito de vivir en el mejor de los mundos posibles con el objetivo de parar la rueda de la historia, Si la perfección ya hubiera sido alcanzada, ¿para qué el cambio? La confianza fundamental en el futuro queda desactivada, solo queda algo de ella disuelta en los entresijos del consumo de masas: la necesidad de una renovación incesante de las mercancías.

      Quizás Bruno Latour está en lo cierto cuando afirma que los modernos hacen lo contrario de lo que predican. Pero eso también les hace interesantes. Evocan continuamente lo es¬piritual inmersos en una sociedad cada vez más secularizada y materialista, invocan la pureza mientras la producción de híbridos es constante, promocionan la transparencia mientras practican la opacidad y convierten la secularización en proliferación de lo teológico. Y quizás, los postmodernos no les van a la zaga.

      Profundizando en las retóricas mencionadas emergen de inmediato síntomas reveladores de la resolución en falso de los problemas más acuciantes de la modernidad, a saber, inscribir la libertad del individuo dentro del orden social, la constitución del sujeto, la alteridad, la construcción del género y el papel de la ciencia y la tecnología en las sociedades contemporáneas.

    • galego

      A retórica da pureza, a transparencia, o baleiro e a nada, indaga na detección dalgunhas das ideas recorrentes a través das cales se interpretou a Modernidade e a Postmodernidade, para pescudar o andamiaxe de construción da realidade que vertebran. As democracias contemporáneas non implican eliminación da disensión nin evitan a tendencia do poder ao autoritarismo. Xa sabemos que as lóxicas de dominación dependen dunha loxística dos símbolos. Os sistemas simbólicos deseñados para dominar o indominable e ordenar a realidade fóronse perfeccionando progresivamente ata a súa case total invisibilización. E todo iso prodúcese mediante unha estratexia con aparencia de xenerosa apoloxía de liberdade.

      Tras a absorción continuada pola orde institucional vixente das estratexias transgresoras das vangardas do século XX, estes discursos vinculados co sagrado e o espiritual dos que tradicionalmente se apropiaran entidades históricamente autoritarias e incorpóreas, son enarborados pola mesma Modernidade que cancelara calquera resonancia transcendental. A postmodernidade sentenza despois a morte dos grandes relatos pero quizais a ausencia de relatos é o gran relato. Nese proceso de crise da realidade homoxénea, cómo se tecen os constructos legitimadores cada vez máis sutís e mergullados que o Estado sedutor pon en xogo? As esixencias estéticas de pureza lingüística, de pureza nas artes, de onde veñen esas ideas? A mestura de elementos procedentes de distintos códigos, disciplinas, culturas...etnias, por qué produce un sentimento de ultraxe? O ornamento é un crime? A forma segue a función? Menos é máis? Cómo se articula este discurso nun mundo onde o distinto xa non é distante? Desde aproximadamente a segunda metade do século dezanove, o ornamento foi sometido a críticas sen precedentes. Pero o elemento forcluído, retorna constantemente, desafiando o dogmatismo purista. Finalmente, desde o punto de vista da postmodernidade, o ornamento non é un simple suplemento, senón a expresión dunha forza vital.

      A pureza e as súas implicacións teolóxicas, e tamén a súa versión secularizada como negación do accesorio, do innecesario, como proceso de ascesis que conduce á pureza reificada da técnica moderna. Ambos estadios están interconectados e non son contraditorios.

      A transparencia, a ficción de que non hai nada oculto, de que todo se ve, é un dos valores máis difundidos no mundo globalizado. Os seus atributos son desexados polos gobernos e as corporacións multinacionais. Unha vez despregados todos os medios para xerar a idea dunha realidade transparente, o novo relato preséntase a sí mesmo como libre de todo mito, como saber sen mediacións. A transparencia é unha cualidade que permite ver a través dun corpo pero á súa vez o invisibiliza sutilmente. Inicialmente ao servizo da loita contra o escurantismo e as políticas abusivas, a transparencia convértese a partir dun determinado momento nun perfecto pretexto para a vixilancia. Os cidadáns somos cada día máis transparentes para un poder cada día máis difuso. A transparencia, conquista ou regresión? Todo debe ser revelado? A posibilidade de poder ver todo implica que todo poida verse? O baleiro e a nada volven ter fortes resonancias teolóxicas. A representación do baleiro responde ao baleiro da representación? É a reminiscencia do sublíme romántico? E tamén o baleiro como ideal da sutilidade, da capacidade de ser receptivo e maleable. A forma ideal para ser utilizada como comodín para o discurso que se queira lexitimar.

      Nos últimos tempos de crise do modelo moderno, o interese polo sublime intensificouse na filosofía, a historia e a estética. O sublime é o que se levanta ao bordo do límite. E nese discurso, a contemporaneidade, erixida sobre o fracaso do saber nas súas pretensións de universalidade arrastra á visión na súa caída cara ao baleiro e a elipsis. Sempre ata agora relacionado coa divindade e o absoluto, o sublime, queda agora ao servizo da idea de progreso, para lexitimalo. Como dixera o filósofo de Frankfurt: non se pode escribir poesía despois de Auschwitz. Con todo, a arte é máis necesaria que nunca. Aínda que sexa con respiración asistida, a arte debe reconstruír unha dimensión da experiencia que quedaría baleira coa súa desaparición.

      Por último, a nada é outro gran relato legitimador cuxa finalidade inmovilista tende a conservar inalterable a realidade. Nas sociedades barrocas identificouse co fin, coa morte, e nas sociedades contemporáneas, o fin da historia xoga o mesmo papel. Xérase o mito de vivir no mellor dos mundos posibles co obxectivo de parar a roda da historia. Se a perfección xa fose alcanzada, para qué o cambio? A confianza fundamental no futuro queda desactivada, só queda algo dela disolta nas reviravoltas do consumo de masas: a necesidade dunha renovación incesante das mercadorías.

      Quizais Bruno Latour está no certo cando afirma que os modernos fan o contrario do que predican. Pero iso tamén os fai interesantes. Evocan continuamente o espiritual inmersos nunha sociedade cada vez máis secularizada e materialista, invocan a pureza mentres a produción de híbridos é constante, promoven a transparencia mentres practican a opacidade; e converten a secularización en proliferación do teolóxico. E quizais, os postmodernos non lles van á zaga.

      Profundando nas retóricas mencionadas emerxen de inmediato síntomas reveladores da resolución en falso dos problemas máis perentorios da modernidade, a saber, inscribir a liberdade do individuo dentro da orde social, a constitución do suxeito, a alteridade, a construción do xénero e o papel da ciencia e a tecnoloxía nas sociedades contemporáneas.

      PALABRAS CLAVE: Retórica, sistemas simbólicos, crise da modernidade, alteridade, tecnoloxía, estratexias de lexitimación.


Fundación Dialnet

Dialnet Plus

  • Más información sobre Dialnet Plus

Opciones de compartir

Opciones de entorno