ntroducción: La Enfermedad Inflamatoria Intestinal es una patología digestiva, crónica y limitante que engloba a la Enfermedad de Crohn y a la Colitis Ulcerosa. En la actualidad constituye un importante problema de salud debido al brusco incremento epidemiológico en los países desarrollados, así como el gran impacto social y económico que genera. Según la OMS, la mejora de la calidad de vida constituye el objetivo principal en el abordaje de las enfermedades crónicas. En estos pacientes la calidad de vida se ve alterada incluso en ausencia de síntomas intestinales, siendo preciso determinar también los predictores psicológicos y sociales de su deterioro y que pueden ser potencialmente modificables. En este sentido, el afrontamiento del paciente a la nueva situación de salud y el apoyo de las personas con las que convive son elementos que condicionan la respuesta de las personas a procesos vitales, y creemos que pueden condicionar el deterioro de la calidad de vida incluso en ausencia de síntomas.
Objetivo: Conocer la influencia del afrontamiento y el apoyo socio-familiar en el riesgo de deterioro de la calidad de vida relacionada con la salud en la Enfermedad Inflamatoria Intestinal, identificando diferentes perfiles de pacientes.
Metodología: Estudio correlacional descriptivo, de corte transversal y técnicas de análisis multivariante. Se reclutan 181 pacientes diagnosticados de Enfermedad de Crohn o Colitis Ulcerosa en las consultas externas del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe mediante muestreo no probabilístico consecutivo. Primero se estudio, mediante análisis bivariantes, la relación entre variables socio-demográficas, clínicas, de la autonomía, psicológicas y socio-familiares con la puntuación de la calidad de vida medida con el cuestionario especifico IBDQ-36. Después se identificaron los predictores del deterioro de la calidad de vida mediante análisis de regresión lineal multivariante. Y por ultimo, se realizo una clusterización de los pacientes, con un análisis de conglomerados K-medias, según el riesgo de deterioro de su calidad de vida en relación al afrontamiento emocional, el apoyo familiar y la actividad clínica.
Resultados: Se identificaron 5 dimensiones de la calidad de vida con el cuestionario IBDQ-36: control de autonomía, control de energía, síntomas digestivos, control emocional y control nutricional. El modelo final de la regresión multivariante explico un 67.2% de la varianza del deterioro de la calidad de vida e identifíco como predictores la presencia de depresión/ansiedad (Beta=-.253), la actividad clínica (Beta=-.327), el afrontamiento emocional desadaptativo (Beta=-.210), problemas en la movilidad (Beta=-.218), presencia de dolor (Beta=-.182) y la disfunción familiar (Beta=.135). En el análisis de conglomerados se obtuvieron 4 clusters, donde la actividad clínica por si misma no marco la puntuación de la calidad de vida, siendo el nivel de afrontamiento emocional y el tipo de apoyo familiar los que modularon la puntuación final.
Conclusiones: El apoyo familiar y el afrontamiento emocional actúan como variables compensatorias del aumento de la actividad clínica amortiguando su impacto sobre la calidad de vida relacionada con la salud, identificandose cuatro perfiles de pacientes: Controlados, Reforzados, Debilitados y Fragiles.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados