Este trabajo de investigación fue realizado con la finalidad de evaluar la dureza Vickers de cuatro aleaciones, después de tres fundiciones.
En la primera fundición se utilizó una aleación nueva, en la segunda fue usada la misma aleación de la primera, y en la tercera la misma de la segunda pero añadiendo 50% de nueva aleación. Fue elevada también la rugosidad de las aleaciones después de cada fundición, sin corrosión y con corrosión.
Los resultados obtenidos fueron: La dureza Vickers fue mayor en la primera fundición, la segunda y tercera fundiciones presentaron menores valores de dureza en todas las aleaciones investigadas. La dureza Vickers del oro-platino fue la que presentó los menores valores de dureza, la aleación de cobre-platino los mayores valores de dureza, las aleaciones de plata-paladio y níquel-cromo presentaron valores de dureza intermedios pero semejantes.
Con relación a la rugosidad, la primera fundición presentó los valores más bajos, pero en la segunda y tercera los valores de rugosidad fueron mayores sin diferencia estadísticamente significativa. En cuanto a los tratamientos sin corrosión y con corrosión las aleaciones mostraron diferencia estadística significativa en su rugosidad, pero las diferentes aleaciones no mostraron diferencias estadísticas significativas entre ellas.
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