Málaga, España
La complicación más temible de la esofagectomía es la fuga anastomótica, cuyo manejo puede ser conservador o quirúrgico según el impacto clínico y la extensión de la misma.
Se presenta el caso de un paciente con estenosis esofágica péptica intervenido mediante esofagectomía Ivor-Lewis toraco-laparoscópica. Al segundo día postoperatorio desarrolla dehiscencia anastomótica, la cual requiere tratamiento quirúrgico. Se evidencia anastomosis dehiscente en un tercio por lo se realiza sutura sobre tubo de Kehr y epiploplastia, junto a lavado de cavidad torácica y yeyunostomía. La evolución fue favorable con cierre de Kehr tras control baritado a los 14 días y retirada definitiva a los 2 meses.
El uso de la fistulización dirigida con Kehr fue descrito inicialmente como tratamiento de perforaciones esofágicas como alternativa a la sutura primaria simple. Su utilidad puede extenderse a la dehiscencia de anastomosis esofagogástrica, particularmente en el contexto de que ésta sea parcial y no exista isquemia.
The most feared complication of esophagectomy is anastomotic leak. Its management conservative or operative depending on clinical impact and its magnitude.
We report the case of a patient with peptic esophageal stricture who is operated, performing thoracoscopic and laparoscopic Ivor-Lewis esophagectomy. He develops an anastomotic leak with sepsis in the second postoperative day, which is treated with surgery. During surgery a leak of one third of the anastomosis is found; then a suture over T-tube is made, with omentoplasty, chest washout and jejunostomy. Clinical evolution was good, with closure of T-tube after barium control 14 days later, and removal 2 months later.
T-tube repair was first described as a treatment for esophageal perforations, being an alternative of simple suture. Its utility can be extended to esophagogastric anastomotic leaks, mainly when they are partial and no ischemia is found.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados