Fernando Gómez-Bezares Pascual, José Antonio Madariaga Ibarra, Javier Santibáñez
En la toma de decisiones financieras siempre se le da al riesgo una consideración negativa: las inversiones más arriesgadas deben rendir más, oímos decir a los expertos.
Y llevan razón. Pero existen casos particulares en los que el riesgo de una decisión no es tan perjudicial, pues esta ofrece situaciones que siempre superan a la posición de partida.
En este artículo ofrecemos casos en los que esto ocurre y realizamos para ello un análisis. sugerente. Pretendemos, sobre todo, alertar al lector de no tener una visión tan negativa del riesgo. Riesgo es variabilidad, y varía mucho de ganar 100 a 100.000, pero si siempre gano, ese riesgo no parece tan malo.
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