Que nos quiten lo "bailao": los españoles no están dispuestos a apretarse el cinturón hasta que no pasen las Navidades

• Autores: Maite Alfageme, María Luisa Atarés, María Corisco
• Localización: Época, ISSN 0213-1080, Nº. 409 (22-28 DICIEMBRE), 1992, págs. 12-18
• Idioma: español
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• Resumen

  • ¿Ha hablado alguien de crisis? La llegada de las Navidades y los mensajes de los comerciantes incitando a consumir y a comprar la felicidad han dado al traste con las consignas de ahorro y moderación en el gasto que, desde hace meses, viene propugnando el Gobierno. Los españoles hemos aparcado la psicosis de crisis estas fiestas y, cerrando los ojos a la cuesta de enero que se avecina, nos disponemos a fundir alegremente la extra de Navidad. De hecho, los sectores de ocio, turismo, alimentación, artículos de lujo y hostelería confían en hacer nuevamente su agosto. Un agosto entre comillas, que cifra sus mejores expectativas en mantener el nivel de ventas de la campaña navideña del año 91. Comerciantes juegan una vez más a esconder la cabeza durante las fiestas y a hacer la vista gorda ante una crisis económica que se hace cada vez más patente. Un dicho muy español resume el sentimiento que impera ante las vacas flacas del año entrante: ¡Que nos quiten lo "bailao"!.