En el presente artículo, se pretende mostrar la relación problemática entre el cine de Santiago Álvarez y los principios sustantivos del cine-ensayo. Los teóricos del cine-ensayo definen como caracteres específicos de este género a la expresión del pensamiento racional, la escritura de la subjetividad y la utilización de material audiovisual heterogéneo. Si bien es verdad que el cineasta cubano hace uso de estas estrategias, también es cierto que las pone en crisis y las resignifica; de esta forma, aporta una nueva perspectiva en la cual las tácticas de enunciación de lo común –de un yo colectivo- y de un pensamiento sensible, y no sólo racional, permiten un ensanchamiento y una reconceptualización de la noción de cine-ensayo. Al hilo del desarrollo teórico y analítico que planteamos, tendremos en cuenta las mutuas relaciones que se establecen entre los dispositivos estéticos y narrativos y las formas de acción política en la obra del cineasta cubano.
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