Como Santo Tomás de Aquino, San Alberto Magno y Fra Angélico, este hombre es dominico, uno de los siete mil miembros de la orden religiosa de maestros predicadores fundada en el siglo XIII, que en el mundo preside un irlandés, y en España un asturiano, el padre Lastra. Pablo López de Osaba, un vasco-navarro que nació en 1934, en Guadalajara, y estudió filosofía, teología y arte en Salamanca, Ávila y Munich, no es un "ex cura", como algunas reseñas erróneamente señalan, sino un cura de aspecto refinado que, como el padre Sopeña, ha sabido compaginar la vocación religiosa con la pasión por la música...
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