Colombia
Ha sido la reflexión social -menos armada que otras disciplinas del saber por axiomas científicos, más permeable a las opiniones- un campo propicio para las defunciones y las resurrecciones de oficio. Hipótesis, sistemas teóricos, fenómenos que se creían evidentes y aún estilos de trabajo, han sido declarados muertos con la solemnidad no exenta de desdén con que los vivos suelen despediresas esperanzas que resultaron ser más perecederas de los previsto.De inmediato y sobre el rey muerto, otro rey es puesto. Una nueva teoría, un fenómeno recientemente liberado, una óptica apenas estrenada se yergue sobre el horizonte de lo social y hace de luz referencial para la mayoría de los quehaceres y decires. Pero otra muerte vendrá que les recuerde a los analistas la precaridad de sus certezas y otra guía se levantará flamante en su hora matinal. Sólo que ésta podría ser la resurrección de algo fenecido mucho tiempo antes, con lo que la incertidumbre frente a la verdad se volvería entonces una curiosa certidumbre: ese resurrecto también habrá de morir más tarde.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados