Resumen de Comienza la batalla de Madrid: ante las elecciones municipales de junio
"Una de mis primeras preocupaciones será la transparencia de la gestión municipal..." La frase es de don Enrique Tierno Galván, y fue pronunciada en la noche-madrugada del martes-miércoles, entre el 3 y el 4 de abril, festividades de los santos Benigno y Benito, por si interesa la precisión del calendario ahora que se cumplen ocho años de entendimiento municipal socialcomunista en el corazón de Madrid. Doscientos mil candidatos arrancaban en las llamadas primeras elecciones democráticas para los ayuntamientos que se celebraban en España después de casi medio siglo. Se trataba, en toda España, de cubrir 65.000 puestos de concejales y 8.000 sillones de alcaldes, más de 3.000 de diputados provinciales. El antecedente en el que se fijaron todas las miradas, a la hora de la convocatoria de estas elecciones de abril de 1979, estaba también en otro mes de abril, día 12, del año 1931, es decir, 48 años antes. De acuerdo con la Ley Electoral de 1907, que establecía el sufragio universal directo y secreto, los comicios de 1931 se celebraron en un día soleado y con presencia en los colegios electorales de un 66,9 por 100 de la población censada. Quedaban excluidos, sin embargo, las mujeres y el clero, además de los menores de 25 años...
