Domingo Iturbe Abasolo, Txomin, 43 años de edad y 20 dedicados al terrorismo, pereció en el nuevo "santuario" etarra de Argel, en un accidente de tráfico que sus correligionarios se apresuraron a calificar de fortuito. Jefe de la rama más dura de ETA desde 1975 -se le atribuye la responsabilidad de unos quinientos asesinatos-, parece que en los últimos meses mantuvo contactos con el Ministerio del Interior para buscar una salida negociada al problema terrorista. En noviembre último, el secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, se entrevistó con él y, según fuentes consultadas por ÉPOCA, le encontró cansado, desilusionado, dubitativo. Su desaparición abre serias incógnitas sobre el futuro de la banda terrorista.
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