La literatura avala la eficacia de los implantes osteointegrados en pacientes parcialmente edéntulos, pero hay que tener precaución en los adolescentes con una formación ósea incompleta, ya que los implantes no acompañan al crecimiento normal de los maxilares y se comportan como dientes anquilosados. También podrían interferir en el normal crecimiento del proceso alveolar y comprometer a los gérmenes de los dientes permanentes adyacentes o alterar su erupción. La descripción de este caso analiza los hallazgos clínicos y radiológicos desfavorables de la reposición de un diente unitario en un varón joven durante un período de 15 años.
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