Resumen de El nacionalismo vasco se rompe
María Eugenia Salaverri, José Gordejuela
Con el reemplantamiento y actualización vigorosa del nacionalismo de Sabino Arana, la integridad territorial de Euskadi, la defensa del euskera y la reforma de la organización interna de la actual Comunidad Autónoma Vasca, nace en la madrugada del 4 de septiembre el nuevo partido Eusko Abertzaleak-Nacionalistas Vascos, con el que se culmina la escisión del PNV y se convierte a los expulsados de Vitoria y, en general, a la línea crítica contra Arzalluz y el peneuvismo oficial, en la nueva alternativa electoral del nacionalismo vasco. En este documento de cuatro folios y medio se afirma el propósito de seguir luchando por el País Vasco en un marco de modernidad y progresismo y el establecimiento de una Comisión coordinadora que empiece a recoger todas las adhesiones necesarias. La redacción se debe a la famosa Junta de Vitoria expulsada. Se abre así una fecha histórica. Lugar: Vitoria. El mismo nombre del partido denota el paralelismo con el PNV, aunque con las discrepancias de fondo relativas a la radicalización nacionalista, con la que se hace una profunda crítica de los actuales dirigentes del PNV, a quienes se acusa de abandonar dichos principios, de una concepción antidemocrática del funcionamiento interno y de depuración. Sólo hubo 4 votos en contra frente a 313 a favor. Carlos Garaicoechea, que tuvo acceso a la carta fundacional, ha dado su visto bueno.
