El extremismo político de derecha aparece con sus rasgos contemporáneos a partir de la Primera Guerra Mundial.
Gran Bretaña ha perdido su condición de vértice de la globalización y Estados Unidos, aunque pudo reemplazarla como potencia rectora a partir de 1919, no fue capaz de ocupar el liderazgo global hasta 1942, cuando participó en la Segunda Guerra Mundial. El extremismo partidario surge con el partido comunista una vez que triunfa en la revolución bolchevique, y el Estado soviético extiende su revolución.
Como reacción, en Europa surgirán los partidos revolucionarios de extrema derecha, fascistas, nacionalsocialistas, etcétera.
Con la derrota del nazismo en 1945, los partidos de extrema derecha perdieron en Europa toda legitimidad. Desaparecida la URSS, la globalización producirá aumento de las desigualdades sociales y Estados Unidos cede a tendencias autárquicas.
Aparecen entonces fuerzas ultras, caracterizadas por el populismo. En la Unión Europea irrumpen derechas radicales, que no son revolucionarias. Por el contrario, en los Estados Unidos de Donald Trump, una derecha revolucionaria, dispuesta a suprimir el orden mundial de 1945, puede apoderarse del partido republicano.
Right-wing political extremism appears with its contemporary features after the First World War. Great Britain has lost its status as the apex of globalization, and the United States, although it was able to replace it as the leading power starting in 1919, was not able to occupy global leadership until 1942, when it participated in World War II. Partisan extremism arises with the communist party once it triumphs in the Bolshevik revolution, and the Soviet State extends its revolution. As a reaction, far-right revolutionary parties, fascists and national socialists, etc., will emerge in Europe. With the defeat of Nazism in 1945, extreme right-wing parties lost all legitimacy in Europe. With the USSR gone, globalization will lead to an increase in social inequalities and the United States gives in to autarkic tendencies. Ultra forces then appear, characterized by populism. Radical rightwings are breaking into the European Union, which are not revolutionary. On the contrary, in Donald Trump’s United States, a revolutionary right, ready to suppress the world order of 1945, can take over the Republican party.abstract.
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