¿Por qué atrae el "Estado Islámico"?
- Autores: Moussa Bourekba
- Localización: Notes internacionals CIDOB, ISSN-e 2013-4428, Nº. 112, 2015, págs. 1-5
- Idioma: español
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Resumen
Las nuevas características –territoriales, ideológicas, estructurales e incluso institucionales- deben llevarnos a reflexionar sobre las razones mismas del atractivo de la OEI si se pretende, a la larga, desactivarla.
Los perfiles radicalizado-a-s tradicionales que era habitual considerar están actualmente superados: no sólo el joven marginado y excluido, sino también, personas de clases medias y familias enteras, se han marchado para vivir en «tierra del islam».
La desastrosa gestión de la tragedia siria por las cancillerías occidentales, cuyas promesas de intervención no se materializaron, ha contribuido a alimentar el resentimiento.
En una perspectiva regional, los partidos que representaban inicialmente una alternativa a los regímenes existentes pasaron a convertirse en partidos de Gobierno y acabaron perdiendo su carga contestataria.
En el plano geopolítico, el salafismo yihadista pretende defender a los musulmanes oprimidos allí donde se encuentren y reunirlos a todos bajo una única entidad: el califato islámico.
La lectura de las relaciones internacionales está calcada, a la inversa, en la teoría del choque de civilizaciones de Huntington: es Occidente el que declara la guerra al islam y los «musulmanes» deben luchar junto a sus hermanos contra esa guerra apocalíptica.
Al controlar un territorio casi equivalente al Reino Unido, con cierta continuidad territorial, la OIE ha roto radicalmente con todo lo que una organización salafista yihadista había hecho anteriormente.
Al contrario de Al Qaeda, la existencia de un territorio que permite santuarizar la doctrina yihadista es el núcleo de la estrategia adoptada por la OEI, no solo en materia ideológica sino también en materia de comunicación.
Con una estrepitosa aparición en escena por su extrema brutalidad, la agenda mediática ha sido gradual, siguiendo una lógica que revela precisamente su estrategia comunicacional.
Sólo un enfoque multidimensional permite relativizar la visión del salafismo yihadista como corriente exclusivamente religiosa ya que la mayoría de personas a las que la OEI atrae solo tienen una socialización reciente con la religión.
