Con este artículo se pretende participar en un debate abierto sobre la situación de desconcierto, pero también de optimismo, que se vive en la actualidad en el campo de la investigación y de la enseñanza de las ciencias sociales. ¿Qué ha pasado en los últimos años en la investigación y en la enseñanza de la historia? ¿Cómo se refleja esta investigación en aspectos tan importantes como la formación del pensamiento histórico o el aprendizaje del tiempo? ¿Hacia dónde debería caminar la investigación de la didáctica de la historia? ¿Cómo debería afectar a la práctica de enseñanza de la historia en las aulas? No se pretende aquí dar respuesta a estas preguntas, sino aportar algunas ideas de futuro sobre hacia dónde debe dirigirse el debate, y también proponer algún instrumento y alguna idea para la investigación y para solucionar los problemas actuales.
© 2001-2024 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados