Las temperaturas altas infunden respeto. Y no es para menos, ya que cuando ascienden a valores de tres dígitos, exceden con creces lo que cualquier ser vivo podría soportar. Sin embargo, para muchas industrias son imprescindibles y desempeñan un papel fundamental en varios procesos como la calcinación, la pirólisis y la gasificación. Antes se utilizaban para ello hornos rotatorios u hornos de secado, pero actualmente las empresas apuestan cada vez más por procesos dinámicos con secadores de contacto horizontales o verticales. Martin Specht, area sales manager de BHS-Sonthofen, explica cuáles son las ventajas que esto ofrece para los procesos termoquímicos y termofísicos.
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