Resumen de Termografía y monitorización como herramientas para el análisis y la toma de decisiones en las propuestas de mejora de Rehabilitaciones Energéticas
Marta Epelde, Irene Reyero, Josu Hernández
Las rehabilitaciones energéticas de edificios existentes deben ser analizadas y diagnosticadas individualmente por la diferente casuística, el diferente grado de deterioro constructivo y los diversos tipos de deficiencias energéticas que encontramos en el parque edificado. Entender correctamente el funcionamiento energético del edificio y sobre todo, entender el porqué de las patologías energéticas (consumos excesivos, condensaciones, puentes térmicos, ausencia de aislamiento, etc.) es vital para poder desarrollar una mejor solución constructiva y también para proponer medidas de mejora específicas para la actuación. Además permite ordenar las acciones correctamente por grado de eficiencia o prever fases, para que el uso de recursos, económicos, energéticos o materiales, sea lo más eficaz posible. Al fin y al cabo, los problemas energéticos de un edificio no vienen dados exclusivamente por las carencias en la envolvente de los mismos, sino que el excesivo consumo energético y las patologías energéticas son la consecuencia de diversos orígenes que se combinan para crear estas problemáticas. Conocer los detalles y entender las causas, más allá de los consumos que nos arrojan las facturas es lo importante, porque quizá se esté apostando por una actuación exclusivamente en instalaciones cuando, sin embargo, la problemática más relevante puede estar asociada con las pérdidas por infiltraciones de aire y la ausencia de aislamiento. La hipótesis o pregunta principal de nuestro trabajo fue si la termografía y la monitorización son esenciales para obtener los datos que puedan orientar eficazmente hacia una imagen global sobre las patologías energéticas que sufren los edificios. En consecuencia el objetivo principal de nuestra investigación es comprobar si la toma e interpretación de datos mediante termografía y monitorización previa a la actuación, destacan como herramientas fundamentales para el diagnóstico del comportamiento del edificio y de su uso, y si son procedimientos completos y complementarios en los casos que nos ocupan. La metodología utilizada en los dos casos prácticos ha sido la toma de datos sistemática y planificada según nuestro criterio previo y además según las necesidades detectadas a lo largo del trabajo de campo. Posteriormente, la gran cantidad de datos obtenidos requirió de un acertado y exhaustivo análisis e interpretación, en el que fue de gran ayuda el conocimiento que ya existía previamente de los intercambios energéticos y las condiciones de confort que se dan en los edificios. La interpretación de los resultados sugiere que los datos obtenidos con estas herramientas llevan a optimizar la toma de decisión de las actuaciones necesarias y en otros, incluso han propiciado la adopción de medidas no contempladas inicialmente, aportando siempre información vital y descubriendo problemáticas que no habían sido detectadas previamente. Por tanto, podemos concluir que la toma, estudio y análisis de los datos obtenidos con las termografías y la monitorización, han sido clave en las propuestas de mejora de las rehabilitaciones energéticas.
